Seis años de prisión por un atropello mortal a un motorista en Leintz-Gatzaga
Los hechos sucedieron en 2019 cuando el conductor de un turismo, positivo en alcohol y drogas, embistió a la motocicleta en una curva
Han transcurrido ya seis años desde aquel fatídico 7 de junio de 2019. Pasaban diez minutos de las siete de la mañana, y O. B. – ... de 36 años, natural de Zamora y residente en Aretxabaleta– se desplazaba en motocicleta a su lugar de trabajo cuando un turismo segó su vida en la carretera GI-627 a la altura de Leintz-Gatzaga. Ahora, más de un lustro después y tras un tedioso proceso judicial, la Audiencia Provincial de Gipuzkoa ha emitido una resolución condenatoria contra el conductor que provocó el accidente mortal. Una pena de 5 años y 11 meses de prisión por los delitos de homicidio por imprudencia grave utilizando vehículo a motor, conducción bajo los efectos de las bebidas alcohólicas y drogas tóxicas, conducción temeraria y abandono del lugar del accidente.
Según el relato de los hechos que se ofrece en la sentencia, el condenado, de origen marroquí en situación regular en España, conducía «con sus facultades disminuidas» como consecuencia de haber ingerido en exceso «bebidas alcohólicas y habiendo consumido cocaína». Pasó la noche de fiesta en Vitoria con motivo de «la finalización del Ramadán», indican fuentes cercanas al caso. Entonces, «con ánimo de atentar contra la seguridad del tráfico rodado», condujo en ese estado varios kilómetros por la GI-627 –vía con un carril para cada sentido– dirección Eibar.
Al llegar al punto kilométrico 18.700, a la altura de Leintz-Gatzaga, efectuó un adelantamiento por el carril izquierdo a la salida de una curva a la derecha, «haciendo caso omiso de toda la señalización existente de prohibido adelantar». En el momento en el que realizaba la maniobra colisionó con la parte lateral izquierda de su vehículo con la motocicleta conducida por O. B., propiedad de su hermano, que «circulaba correctamente por su carril» y no pudo hacer nada para evitar el choque. El motorista murió en el acto y el conductor del turismo, que iba acompañado de otros tres ocupantes, huyó del lugar del accidente.
El condenado tenía antecedentes penales por «delitos de conducción sin permiso y bajo influencia de bebidas alcohólicas»
La huida finalizó unos kilómetros más adelante en la carretera GI-3310, en la que se detuvo «por los daños que sufría su propio vehículo». Ocho minutos después de la colisión se realizó una llamada a la Ertzaintza «desde el teléfono móvil del condenado» para comunicar el accidente, y éste fue localizado a cuatro kilómetros y medio del lugar de los hechos.
Incapacitado para conducir
Presentaba síntomas tales como «moderado olor a alcohol, ojos rojizos y brillantes, voz ronca, locuacidad, depresión o capacidad de expresión confusa». En definitiva, «no mostraba capacidad para conducir». Los agentes de la Ertzaintza le realizaron dos pruebas de detección alcohólica, arrojando un resultado de «0,45 miligramos de alcohol por litro de aire espirado» en ambas. También se le practicó la prueba de detección de sustancias estupefacientes, en la que dio un resultado «positivo en cocaína».
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El juicio tuvo lugar el 5 de marzo de 2025, y tras una sentencia de primera instancia la defensa decidió presentar un recurso solicitando la rebaja de la pena impuesta, que en un primer momento era de 6 años y 2 meses. La Audiencia Provincial ha confirmado esta sentencia del Juzgado de lo Penal nº2 de Donostia, con una única variación. Se ha aplicado una rebaja de condena de tres meses por un «fallo de cálculo» de la jueza en las penas impuestas, pero se ha mantenido la atenuante de dilaciones indebidas en su grado simple por «retardos en la tramitación».
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