«Que se queden con el local si quieren pero con la casa de mis padres no, por favor»
Los pensionistas Manuel y Mari Mar, vecinos de Altza, pueden perder su vivienda con la que avalaron el préstamo impagado de su hija para adquirir un local
Manuel y Mari Mar, vecinos del barrio donostiarra de Altza, pueden verse en la calle si no se paraliza la demanda de ejecución hipotecaria contra ... su vivienda, con la que avalaron el préstamo de un local que adquirió su hija y que firmó con Kutxabank. Esta familia vive una asfixiante cuenta atrás desde que recibieron la notificación del banco en verano. «Esto es una pesadilla. Que se queden con el local si quieren, pero por favor, la casa de mis padres no, eso no», rogó este miércoles entre lágrimas Sandra Bon, hija de esta pareja de pensionistas. Representantes de la plataforma Stop Desahucios, así como de las instituciones vascas y vecinos de Donostia se concentraron este miércoles a las puertas de Kutxabank, en la calle Garibay, para tratar de impedir la subasta y posterior desahucio de la vivienda ya pagada de este matrimonio. Tanto Mari Mar como su hija Sandra se mostraron visiblemente afectadas. «Espero que todo salga bien», expresaron durante su corta intervención.
Las cosas se empezaron a torcer para Sandra «durante la pandemia y por la crisis económica». Pidió un préstamo de 360.000 euros para adquirir un local, pero el negocio por el que decidió apostar, un bar situado en el barrio donostiarra de Gros, no le permitía afrontar las cuotas mensuales del préstamos adquirido hasta que la situación se hizo insostenible. «Todo eran gastos y tuve que cerrar. Íbamos a solicitar una cita con el banco pero en verano nos llegó una carta en la que se nos informaba que habían vendido el préstamo a un fondo buitre -Zima Finance- y la vivienda entraría en subasta», resume.
Así, en junio de 2022, ante los impagos de la cuota del local, Kutxabank interpuso en el juzgado nº 2 de Donostia una demanda de ejecución hipotecaria contra el local y la vivienda de sus padres avalistas. Al deber más de doce cuotas impagadas, la Ley de Créditos Inmobiliarios permite a los bancos y fondos buitre solicitar primero la subasta y después el desahucio.
«Kutxabank ha vendido el préstamo a un fondo buitre por 9.000 euros, es impresentable», critican desde Stop Desahucios
La integrante de la plataforma Stop Desahucios, Rosa García, alerta de que «el juzgado ha admitido a trámite la demanda y en cualquier momento se puede producir la subasta», por lo que urgió a las instituciones a mediar en este asunto y paralizar la demanda. «La vía jurídica está agotada y ahora la denuncia pública y la presión social son nuestras armas. El alcalde donostiarra ya ha iniciado algún contacto y queremos que se eleve este asunto al Pleno y a Juntas Generales para que las instituciones se pongan en contacto con Kutxabank y negocien».
García denuncia la «indefensión» en la que se encuentran muchas familias vulnerables cuyos préstamos hipotecarios morosos «han sido vendidos por Kutxabank al fondo buitre Zima Finance, con sede en Irlanda». La operación se produjo el pasado julio, cuando la entidad vendió una cartera de 2.500 préstamos hipotecarios judicializados, incluido el de esta familia, por 240 millones. «Es impresentable, Kutxabank ha vendido a estas familias. Estos préstamos hipotecarios morosos se venden a precios de saldo y en bloque», lo que impide que el hipotecado pueda comprar por el mismo precio -9.000 euros- la deuda de su hipoteca.
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