A la playa, con toalla, bañador y metro

Donostia fue ayer la primera en dar el paso y anunciar que a partir del lunes, cuando Euskadi entre en la fase 2, acatarán lo que marca el boletín oficial y permitirán el baño y tumbarse en la toalla, además de hacer deporte como hasta ahora. La decisión, no obstante, llegará marcada por la obligación de respetar la distancia de dos metros de seguridad entre personas que no conviven, y en el caso de La Concha, por el cierre del arenal durante la pleamar -no se ha determinado qué franja horaria- cuando el espacio se reduce al mínimo y es imposible garantizar la distancia.

La normativa estatal, que ya permite desde esta semana a los isleños de Fuerteventura, Formentera o Hierro, disfrutar del sol en sus playas, solo apela «al uso responsable de la playa» para evitar aglomeraciones, y recuerda como regulación general que también en este espacio impera la distancia de dos metros entre personas, los grupos inferiores a quince, y las medidas higiénicas para evitar contagios. De momento, en Donostia, preparan sistemas de control de aforo y analizan qué servicios prestar -toldos y gabarrones se eliminan- de cara a la apertura oficial de la temporada a mediados de junio, sin fecha aún fija.

Y de la misma manera en el resto de arenales guipuzcoanos, sus ayuntamientos estudian cómo gestionar esta desescalada playera, y la apertura oficial de la temporada, que será compartida por todas las localidades costeras.

Hondarribia también seguirá el mismo camino. El lunes permitirá el baño y tomar el sol, siguiendo la normativa del Gobierno central, y «mirando al 15 de junio», cuando cada año abre la temporada, prepara los servicios. Según informa Iñigo Aristizabal, la Cruz Roja ha comenzado ya el proceso de selección del personal, donde necesita un responsable de playa, tres enfermeros y socorristas.

Zarautz y Orio aún no tienen decidido si permitir o no ya el uso no deportivo de sus playas. Antxon Etxeberria informa de que el alcalde de Zarautz, Xabier Txurruka, indica que «estamos estudiando la forma de posibilitar las medidas de seguridad» para este verano, y que se han reunido «ya con Salud del Gobierno Vasco y esperamos la publicación de una norma que desarrolle los servicios y protocolos» para los arenales. «No tenemos ninguna decisión firme, iremos informando a lo largo de esta semana, pero lo que es seguro es que será un verano diferente», y «todo hace indicar que no habrá toldos ni socorristas, por lo menos, hasta julio».

Tampoco en Orio, según su alcaldesa Anuska Esnal, han decidido ya abrir el lunes. La regidora se refiere a la reunión de la semana pasada entre ayuntamientos costeros y Diputación foral para concertar el plazo y condiciones de apertura, en su caso, de las playas de Antilla y Oribarzar, «y hasta nueva orden solamente se podrá pasear y practicar deportes acuáticos, con la ventaja de que Orio es una localidad de menos de 10.000 habitantes» y no tendrán horarios.

En Zumaia, informa Sara Utrera, también esperan a una decisión mancomunada en Gipuzkoa, y desde el Ayuntamiento, ciñéndose al BOE, indican que «en la fase 2 se permite el baño, pero no el uso habitual de las playas». Esperan que la temporada abra entre el 15 de junio y el 1 de julio.

En Deba, también prevén dejar a sus vecinos disfrutar de la playa de Santiago desde el lunes, «siempre que esté garantizada la salud y seguridad de todas las personas», indica su alcalde Gilen Garcia, según información de Ander Salegi.

En Mutriku, aunque la temporada no se estrene hasta el 15 de junio, «no ven impedimento» para permitir el baño y tomar el sol desde el lunes, informa Alberto Gorritiberea. Gracias al nuevo bidegorri de 2,5 kilómetros, se ponen en valor dos playas muy diferentes: Ondarbeltz será referencia al recuperar la cantina y los socorristas, y la de Alkolea, espera a los amantes del surf y la tranquilidad. Además, están Saturraran, Burumendi o las piscinas de agua de mar. Hasta ahora los vecinos solo podían mojarse los pies, pero desde el lunes podrán disfrutar del sol, incluso en pleamar.