«La picadura causa un dolor intenso, de quemazón, e incluso taquicardia»
La 'carabela portuguesa' se reproduce en aguas abiertas del océano Atlántico y por lo general está presente «en entornos cálidos»
La presencia durante los dos últimos días de varios ejemplares de 'carabelas portuguesas' en nuestras costas ha obligado no solo a intensificar las labores de ... vigilancia en algunas playas guipuzcoanas sino también dar a conocer el protocolo a seguir en caso de sufrir una picadura de esta denominada 'falsa medusa'. Luis Ferrer, experto en tecnologías marinas de Azti, reconoce que su veneno produce «un dolor intensísimo» y hace hincapié en acudir rápidamente a un puesto de socorro o centro de salud cercano «para evitar graves consecuencias».
– ¿Qué es exactamente la carabela portuguesa?
– Se trata de un organismo colonial formado por pólipos que están especializados para mantener viva la colonia, aunque todo el mundo habla de ella como 'falsa medusa'. Es gelatinosa y la parte de arriba está compuesta por una especia de flotador con la vela. La de abajo, por su parte, que es la que cuelga y hace como lastre con los tentáculos, tiene diversos componentes y cada uno realiza una función. Algunos son para la digestión, otros para la reproducción y otros para su defensa y la captura de presas. En estos últimos tentáculos es donde están las cápsulas urticantes que nos dejan en nuestra piel cuando nos pican.
– Esas cápsulas urticantes son las que nos transmiten su veneno. ¿Tan grave es su picadura?
– En algún caso muy extremo podría causar hasta la muerte, pero no debemos ser alarmantes y hay que explicar que, cuando se ha producido este fatal desenlace, ha sido en personas con algún tipo de problema cardiovascular. No obstante, es cierto que si te pica estando solo y lejos de la costa puede provocar graves consecuencias.
– ¿Cómo podemos saber que se trata de una 'carabela portuguesa' y no de una medusa?
– La 'carabela portuguesa' produce un dolor muy intenso, de quemazón, e incluso taquicardias. Es como si una cuerda ardiendo te pasara por la espalda. Su picadura te deja todo marcado y a la larga hasta cicatrices.
«Cuando son pequeñas son del tamaño de un tapón de plástico y pueden dar lugar a confusión; si dudas, no las toques»
– Su extraña forma hace que podamos confundirla con un plástico, una bolsa o algo similar. ¿Es esto lo que las hace más peligrosas?
– Puede ser. De hecho, cuando son pequeñas suelen ser del tamaño de un tapón de plástico y dan lugar a confusión. Generalmente están tan resecas cuando se encuentran en las playas que la gente las confunde con un plástico. Son varios los casos de paseantes o limpiadores que andando por la orilla han pensado que se trataba de un plástico y han terminado con picaduras. Además, cabe destacar que la 'carabela portuguesa' pica aunque esté muerta. Así que si nos encontramos una en la arena, lo importante es dejar que se sequen y no tocarlas por un tiempo. Esto es algo importante que debemos tener en cuenta.
– Son carnívoras...
– Así es. Se alimentan de peces o de plancton. Es con los tentáculos venenosos con lo que atacan y paralizan a sus presas.
«Las corrientes y el viento del oeste o suroeste son lo que están arrastrando a las 'carabelas portuguesas' hasta nuestras costas»
– Normalmente las medusas o similares suelen vivir en aguas calientes. ¿Es esto otro aviso del calentamiento global y, más concretamente, del calentamiento de nuestros mares?
– En nuestros estudios hemos comprobado que la reproducción de estos organismos se desarrolla en aguas abiertas del océano Atlántico, es decir, que son de aguas cálidas, tropicales. Una vez van creciendo y adquiriendo un tamaño superior, son las corrientes superficiales (porque flotan) y los vientos provocados por las borrascas los que les van derivando hacia la costa. Suelen entrar por Portugal y Galicia y son los vientos de oeste o suroeste los que les arrastran hasta el Golfo de Bizkaia. Como salir de ahí les es prácticamente imposible, finalmente terminan en el Cantábrico y, por consiguiente, en nuestras playas.
– ¿Hay alguna forma de alejarla de nuestras costas?
– No. Lo único que se puede hacer es intensificar los servicios de limpieza tanto dentro como fuera de las playas para que, en caso de ver un enjambre (término que utilizan en Australia cuando encuentran miles), podamos estar rápidos a la hora de recogerlas. Poco más vamos a poder hacer nosotros. Al final, hablamos de un organismo que, con viento favorable, siempre va a acabar aquí y así seguirá ocurriendo. En verano, cuando suben las temperaturas, es posible como ocurrió tanto el domingo como ayer que veamos algunas, aunque puede darse que luego durante un tiempo no presenciemos ninguna. Es difícil hacer previsiones en este sentido. Sí que sabemos que son más de aguas cálidas, que vienen arrastradas por aguas tropicales, pero ese no es el único requisito para su aparición. Con aires y aguas más frías también pueden llegar.
– Por último, ¿qué recomendaría usted a los bañistas?
– Que tengan mucho cuidado y que si ven alguna, que lo notifiquen rápidamente a los servicios de socorro para activar el protocolo. Y a los que les gusta bañarse de noche, les diría que estos días no lo hagan.
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