«La obra de la estación de Atotxa es un desmadre; genera muchos problemas»
Usuarios de la estación lamentan el retraso anunciado por las «incomodidades» del apeadero actual y los «retrasos» que sufren los trenes por las obras
«Incomodidad». Es la palabra que más se repite entre los usuarios de la estación ferroviaria de Donostia cuando son preguntados por las obras que ... se están llevando a cabo y que ayer se enteraron de que se prolongarán hasta otoño de 2025, es decir, casi un año más de lo previsto inicialmente. «Me parece una obra de gran envergadura que quedará bien, pero ahora mismo todo es un desmadre», asegura Charo, vecina de Urretxu. Ella es una de las afectadas por los trabajos que se están llevando a cabo en Atotxa. «Lo peor es la impuntualidad de los trenes por causa de las obras, pero la cosa no acaba ahí», lamenta. Una vez llegas a la parada y sales de la estación, tienes que subir unas cuantas escaleras y cruzar una rampa para poder acceder al Centro. Es incomodísimo, más si cabe para las personas que traen maleta o llevan peso, como es mi caso». Charo viene a San Sebastián todos los martes. «Suelo volver con la bolsa cargada y cuesta hacer todo el trayecto», añade. «Y si encima las obras se van a retrasar un año más... En fin», concluye esta usuaria.
Publicidad
El engorro que suponen las obras que ejecuta el Gobierno Vasco en Atotxa hace que durante el último año, desde que se cerró la terminal anterior, muchos usuarios se hayan decantado por apearse o subirse al tren en la estación de Gros, más accesible que el apeadero provisional.
Por su parte, Juani tiene la sensación de que esto «no ha hecho más que empezar. Desde fuera parece que la obra está prácticamente sin empezar, así que no me sorprende que ahora notifiquen que se vaya a demorar», cuenta con enfado. «Hay muchísimos problemas». Critica que es «un calvario» venir desde Zumarraga, «y ya ni te cuento para los estudiantes y la gente que viene a trabajar. Hoy mismo –por ayer–, el tren que debía salir a las 7.00 horas ha sufrido un retraso por este motivo y los usuarios han llegado a Donosti a las 8.45. Si las clases empiezan a las 8.30 y tienen que ir hasta las universidades o centros de trabajo, no llegan», explica.
El día a día, «un horror»
Daniel es de Irun y utiliza el tren a diario. Lamenta que el día a día «es un horror» por culpa de las obras. Además de denunciar la impuntualidad que sufren Renfe y sus usuarios, el hecho de que se haya cerrado el túnel que da acceso directo a la estación de autobuses le supone un problema añadido. «Si antes tardaba dos minutos en llegar al trabajo ahora tardo el triple», explica. «Las obras hay que hacerlas, eso todos lo sabemos, pero creo que también es importante que nos faciliten las cosas».
Publicidad
Noticia relacionada
La futura estación de Atotxa se retrasa hasta otoño de 2025
Por último, Marian añade que «muchas veces los tornos no funcionan». Coge el tren de las 6.50 de la mañana en Ordizia y el de vuelta, alas 19.25. «Me consta que esta misma tarde –por la de ayer–, ha vuelto a haber incidencias», concluye.
Suscríbete los 2 primeros meses gratis
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión