Jesús Mari Echeverría con el Renault con la placa SS-1, ayer en el Palacio Miramar. Gorka Estrada
El primer vehículo de Gipuzkoa

Un incunable sobre ruedas

Pieza única ·

El Real Automóvil Club exhibe el primer coche que se matriculó en Gipuzkoa, un Renault adquirido en 1901 por un aristócrata, para conmemorar su centenario

Borja Olaizola

San Sebastián

Jueves, 18 de mayo 2023, 02:00

Con una velocidad máxima de entre 30 y 40 kilómetros por hora no se puede decir que el Renault tipo D fuese un prodigio en ... lo que a prestaciones se refiere. El coche, sin embargo, fue el primer vehículo a motor que se conoció en Gipuzkoa. Su propietario, el marqués de Rafal, lo adquirió en Biarritz y lo matriculó en agosto de 1901 en San Sebastián. El Renault del aristócrata fue el primer coche matriculado en Gipuzkoa y por eso luce el número uno en su placa.

Publicidad

Que un coche que en verano va a cumplir 122 años haya llegado hasta nuestros días es una feliz coincidencia. Que lo haya hecho en las condiciones en las que está, en perfecto orden de revista, es ya un milagro. Un prodigio en el que ha tenido mucho que ver Jesús Mari Echeverría, un coleccionista beasaindarra que es su actual propietario. «El Renault –explica– lo compró Alfonso Pardo, marqués de Rafal, que tenía residencias en Madrid, San Sebastián y Biarritz. Estuvo en sus manos hasta que lo dejó de usar en la década de los veinte y debió quedar arrinconado en la cochera de su casa de Biarritz. Un chatarrero de Burdeos que lo descubrió a finales de los años cincuenta lo rescató y se lo vendió a un coleccionista francés que tenía un museo de coches antiguos en Lille. Cuando el dueño del museo murió y su colección se vendió me hice con el Renault porque ya le había echado el ojo tiempo atrás».

Vaciar el depósito

El coche está desde entonces en sus manos. «Está en orden de marcha, lo que pasa es que cada vez que se arranca tenemos que vaciar luego el depósito de gasolina y recuperar todo el combustible del motor porque los aditivos que llevan ahora los carburantes perjudican las piezas». El Renault es una pieza única no solo por su antigüedad, sino por la forma en que se fabricaban entonces los coches. «Renault –precisa Echeverría– vendía el chasis con el motor, que era un De Dion Bouton, pero luego había que carrozar el coche. El marqués lo llevó a una de las mejores carrocerías que había entonces en París, Huret, así que se puede decir que de alguna forma eran automóviles hechos a medida».

El coche fue exhibido este jueves en el Palacio de Miramar con motivo de la presentación del libro que ha publicado el Real Automóvil Club Vasco Navarro (RACVN) para celebrar el centenario de su fundación. Se trata de una publicación escrita al alimón por Miguel Martín y Juanjo Olaizola que resume la actividad del club desde su creación. El libro es solo el preludio de una conmemoración que tendrá su punto culminante el 3 y 4 de junio con un rallye que reunirá a algunos de los más valiosos coches clásicos de Europa.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Suscríbete los 2 primeros meses gratis

Publicidad