La hostelería de Gipuzkoa pide recuperar «de inmediato» los aforos al 50% y la actividad nocturna

El sector hostelero guipuzcoano ha pedido esta mañana «recuperar de inmediato» el aforo interior de sus locales al 50% en lugar del 35% con el que deben trabajar desde el 26 de julio, así como retomar la actividad nocturna, que actualmente está limitada hasta la 1 de la madrugada, después de que el consejo asesor del LABI, en su reunión de finales del pasado mes, decidiera también adelantar en una hora el cese actividades.

El secretario general de Hostelería Gipuzkoa, Kino Martínez, ha reivindicado ambas medidas ante la «delicada situación» que atraviesa el sector, «el único que se nos cierra por el contagio de un solo trabajador», y que acumula «16 meses» de penuria que tendrán su reflejo en la pérdida de «más de 200 o 300 establecimientos de hostelería» como efecto de la pandemia.

Hostelería Gipuzkoa pide la recuperación del ocio nocturno y los aforos interiores al 50% «de forma inmediata» con la confianza de que el LABI político se reúna «la próxima semana aunque sea de manera virtual», ya que considera que sus miembros «no pueden irse de vacaciones» en plena «temporada alta» de su sector y con una situación epidemiológica «peor que hace un año», con la incidencia acumulada de positivos en Covid-19 por encima de los 800 casos por 100.000 habitantes en Euskadi.

Sin embargo, el hecho de que «más del 70% de la población vasca está vacunada» y, según ha subrayado, «esta quinta ola» no haya tenido «nada que ver con la actividad hostelera, y en la tercera y la cuarta hubo otros sectores como la industria y la educación en los que se dieron más contagios, como ya demostramos en otra rueda de prensa hace mes y medio», le llevan a la agrupación a reclamar el aumento de aforos y la recuperación del ocio nocturno.

Tanto Kino Martínez como el directivo de la asociación David Vega, han coincidido en que «no tiene sentido» restringir los aforos interiores de sus locales al 35% cuando «la gente está vacunada» y en 2020 en julio «no había limitación de horario de cierre» y los grupos estaban reducidos a 10 personas por mesa en lugar de a seis como ahora.

Kino ha «denunciado» que la hostelería se ha convertido «en un sector sistémico» respecto a la gestión de la pandemia, al ser «el que más paga los errores que se cometen» por las administraciones. Así, ha recordado que las actuales medidas en vigor –aforos al 35% y cierre a la 1 de la madrugada» entraron en vigor el 26 y el 24 de julio, respectivamente, y la incidencia acumulada de positivos comenzó a bajar el día 30, «sin tiempo» a que las medidas hubieran tenido efecto alguno. Más bien, achaca la mejoría apuntada la última semana «a que han pasado los sanjuanes, los sanpedros, los sanmarciales, los viajes a Mallorca, a Salou, a Burdeos...». Ha insistido en que no pueden ser los paganos de que «no se haya logrado un toque de queda». Es más, considera que la apertura de pubs y discotecas con las correspondientes medidas sanitarias contribuiría «a reducir» la celebración de botellones y quedadas. En este sentido, ha lamentado que «las instituciones no han sido capaces de comunicar con los jóvenes», no ha habido «una labor» de concienciación, ni tampoco «en los centros educativos» para hacer ver a la juventud «que este año no tocaba hacer viajes de estudios».

Respecto a la medida tomada en algunos países y comunidades autónomas de pedir el certificado de vacunación o pasaporte covid para poder acceder a determinados locales y espacios, como bares y resultados, no se han mostrado partidarios de implantarlo también en Euskadi, salvo en el caso de que desaparecieran las restricciones que merman su actividad. «No tendría sentido pedir el pasaporte covid a gente a gente vacunada y que está sana y mantener un 35% de aforo o tener prohibido estar de pie o consumir en la barra».

Como otros veranos, Hostelería Gipuzkoa también ha realizado una estimación de la actividad de los distintos tipos de alojamientos para la actual temporada estival. Se espera que sea algo mejor que en 2020, cuando Gipuzkoa cerró la campaña «con una ocupación del 48,1%» de su capacidad alojativa, mientras que las expectativas este verano «son las de superar el 60%».

Dadas las restricciones vigentes, la mayor parte de las reservas proceden del turismo estatal, «de Madrid, Cataluña y otras comunidades autónomas», mientras se han sucedido «cancelaciones y ha disminuido el ritmo de reservas», especialmente de «franceses e ingleses».

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