Una de las zonas de Irun afectadas por el incendio. lusa

La Fiscalía de Gipuzkoa incoa diligencias por el incendio forestal en Gipuzkoa, Navarra y Lapurdi

Investigará tras una denuncia del colectivo ecologista Eguzki, al considerar que los hechos «son constitutivos de un presunto delito»

Javier Guillenea

San Sebastián

Jueves, 11 de marzo 2021, 17:10

La Fiscalía de Gipuzkoa ha incoado diligencias por el incendio forestal que tuvo lugar los pasados días 20 y 21 de febrero en Bera ... y que afectó a la comarca guipuzcoana del Bidasoa, al estimar que «es constitutivo de un presunto delito», tras una denuncia de Eguzki. Según el colectivo ecologista, un informe de la Diputación de Gipuzkoa sostiene que existen «suficientes indicios para pensar que el incendio o los incendios, que arrasaron casi 2.000 hectáreas en Navarra, Gipuzkoa y Lapurdi, fueron provocados».

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A partir de ahora, según 'Óscar Padura, abogado de Eguzki, la Fiscalía deberá reclamar informes a las administraciones involucradas en el siniestro para determinar su origen y tratar de identificar a los presuntos autores.

La actuación del ministerio fiscal responde a una denuncia presentada el pasado día 4, en la que la organización ecologista recuerda que las zonas más perjudicadas por el incendio en el valle del Bidasoa fueron tres lugares pertenecientes a la Red Natura 2000, la red europea de áreas protegidas destinada a la conservación de la biodiversidad: las zonas especiales de conservación del Macizo de Larrun y Xoldokogaina, río Bidasoa y Aiako Harria. Además, añade la denuncia, «esos días también dieron fuego en diferentes zonas de Bertiz, Baztan, Urruña, Azkaine, Sara, Jaizkibel e Igeldo».

Según el colectivo, «cabría investigar diferentes posibilidades para enfocar el origen del incendio. Así, el mismo podría estar motivado por un lado por una imprudencia grave, lo que exige un elevado grado de peligrosidad insuficientemente controlada. O tal vez el autor o autores podrían haber actuado inicialmente así para obtener un beneficio económico con los efectos derivados del incendio forestal, en relación a la consecución de mejor pasto para el ganado a principios de primavera».

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Eguzki asegura que «la mayoría de las zonas afectadas en el fatídico fin de semana de los hechos denunciados tienen entre otros denominadores comunes la presencia de un uso ganadero, por lo que podría iniciarse esa línea concreta de investigación». En su denuncia, insta a las diferentes administraciones «a conocer e identificar a quienes usan y se pueden beneficiar del uso del fuego en terrenos comunales, consultando los censos de usuarios autorizados mediante los registros municipales». Además, insiste en exigir a todas las administraciones ambientales implicadas a que renuncien definitivamente al uso del fuego en la gestión de nuestras montañas, máxime en las que son de carácter comunal. Porque hay que tener en cuenta que la mayoría de los incendios son, casualmente, provocados en montes públicos y no en las propiedades privadas de pirómanos e incendiarios».

Aunque no es imposible, es difícil que en este tipo de sucesos se acabe identificando a los autores. Lo que sí es cierto es que el fuego dejará secuelas importantes en el terreno afectado. « Los impactos van a depender de la intensidad, recurrencia y duración del incendio forestal. Estos efectos pueden ser directos tales como pérdida de animales, pérdida de la vegetación y degradación del suelo. Los efectos indirectos, por su parte, van desde la erosión del suelo y la contaminación del agua hasta el ensuciamiento de represas y deslizamientos de tierra», dice Eguzki.

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