El mayor incendio en una década en Gipuzkoa

Poco antes de la una de la madrugada los bomberos de Navarra han dado por extinguidas las llamas y han retirado el dispositivo desplegado en la zona. La Diputación de Gipuzkoa también ha subrayado este lunes que el cambio meteorológico y la llegada de la lluvia durante la tarde-noche de ayer «resultaron fundamentales para controlar y acabar con el incendio, que se dio por extinguido hacia medianoche». Tras retirarse el personal de bomberos y bomberas y guardas forestales, se mantuvo un retén vigilando la zona, que también se retiró poco después.

La Diputación ha lamentado que la mayor parte de las hectáreas quemadas en Gipuzkoa son de bosque autóctono, lo que significa «una grave pérdida» para el patrimonio natural de Gipuzkoa. Durante los próximos días se llevará a cabo una valoración más precisa de los daños causados.

Los cuarenta vecinos desalojados el sábado por precaución regresaron ayer por la mañana a sus caseríos, en el barrio del Bidasoa en Irun, donde comprobaron lo cerca que se quedaron las llamas de sus propiedades. Aún con el «miedo en el cuerpo», al menos se contentaban con que el balance no deja daños personales, aunque sí una huella ambiental todavía difícil de calcular. Los dos focos iniciales, los que comenzaron a arder sobre las 9.30 horas del sábado en la zona limítrofe entre Bera y Lesaka ya fueron ayer apagados.

Precisamente el hecho de que las llamas se originaran en estos dos puntos a la misma hora apunta como principal hipótesis a que el incendio pueda haber sido intencionado, según expresó ayer el alcalde de Bera, Aitor Elexpuru. El primer edil relató que los dos primeros focos se desataron prácticamente a la misma hora, sobre las 9.30 horas, en dos puntos separados por el río y la carretera, uno en la zona de Montoia en Lesaka y otro en Villabuena en Bera.

Desde allí, y avivados por las fuertes rachas de viento, los dos focos fueron propagándose hasta causar el incendio en el que anoche seguían trabajando los servicios de emergencia y que pudieron ser sofocados de madrugada. Según Elexpuru, las dos zonas donde se detectaron los primeros focos no son de pastizal, sino que se trata de zonas con menos arbolado y por lo tanto no parece que el origen del incendio haya sido la quema descontrolada, como en un principio se pensó.

400hectáreas de vegetación y superficie forestal ha quemado el incendio en Gipuzkoa. En total, junto con las zonas en Navarra e Iparralde, son 1.800 hectáreas arrasadas.

Elexpuru, no obstante, dijo que hay abierta una investigación de los bomberos y de la policía foral y que serán ellos quienes determinen el origen del incendio.

Sobre el terreno, en el puesto de mando móvil instalado en el polígono de Zaisa, siguieron de cerca las tareas de extinción el portavoz del Gobierno Vasco, Josu Erkoreka; la portavoz de la Diputación, Eider Mendoza, el diputado general de Gipuzkoa, Markel Olano y el alcalde de Irun, José Antonio Santano.

Según explicó el vicelehendakari primero, las condiciones meteorológicas no permitieron ayer poner en marcha el operativo de los hidroaviones del Ministerio ante la dificultad de poder volar con seguridad pero afirmó que «está listo». La «positiva evolución» del incendio, con la disminución de la fuerza del viento acompañado de la lluvia, permitió el levantamiento ayer a última hora de la tarde del nivel 2 del Plan de Emergencias para Riesgo de Incendios Forestales de Navarra, activado horas antes al comprobarse que el incendio no podía ser atajado con los medios propios de la comunidad foral. En este sentido, Erkoreka puso en valor que «la situación ha mejorado considerablemente gracias al trabajo conjunto y coordinado de las instituciones», labor que requirió la colaboración de los efectivos de la UME (Unidad Militar de Emergencias) y que tras actuar en el control de algunos flancos como el de Baztán y en tareas de refresco en el área quemada por el frente de Bera regresaron ayer a su base de Zaragoza.

Por fortuna, ninguna persona tuvo que ser rescatada en situación de riesgo y se pudieron evitar daños materiales en las viviendas más cercanas a los focos del incendio. Asimismo, las carreteras afectadas, la N-121A y la GI-3455, se encuentran abiertas al tráfico desde ayer en ambos sentidos.