«Cuando me desperté estaba totalmente desnuda y tenía a él encima abusando de mí»
La Fiscalía mantiene la petición de 14 años de prisión para un joven acusado de violar a dos amigas en su domicilio de Eibar
«Me desperté en mitad de la noche, con la cara sobre la almohada y ahí es cuando vi y noté que él me estaba ... penetrando vaginalmente», ha declarado este lunes la víctima de una presunta violación por parte de un joven de 24 años en su domicilio de Eibar. Para el acusado la Fiscalía de Gipuzkoa y la acusación particular solicitan 14 años de prisión, siete por este delito y otros tantos por otra supuesta agresión sexual. Las dos mujeres, una de ellas menor de edad el día de autos, han reconocido ser amigas del procesado cuando ocurrieron los hechos. «Solíamos quedar para beber y fumar».
El primer hecho investigado tuvo lugar presuntamente el 27 de agosto de 2020, cuando el procesado y la primera víctima, de 17 años, pasaban la tarde en la calle junto a otros dos amigos (un chico y una chica) «bebiendo cervezas y fumando marihuana», han asegurado los cuatro protagonistas en el juicio celebrado en la Audiencia Provincial. Horas más tarde, todos ellos se dirigieron al piso en el que vivía el procesado, donde continuaron bebiendo «una botella de aguardiente y fumando», han añadido los cuatro miembros del grupo.
En un momento determinado, fruto de la mezcla de lo consumido, la joven empezó a encontrarse mal, «estaba mareada», por lo que tuvo que acudir al baño a vomitar. Vista su tardanza, la amiga y el procesado se acercaron para ver cómo se encontraba y, según los testigos presentes, ambos le tuvieron que sujetar «porque le costaba caminar» y le acompañaron hasta tumbarse en la cama de este. En ese instante, le pusieron una camiseta de color blanco por encima del vestido que llevaba, si bien no han sabido especificar por qué motivo lo hicieron. Una vez allí, ha relatado su amiga, «le dije varias veces si quería venirse conmigo, pero ella me respondió con la cabeza que no. No podía hablar».
De esta forma, sobre las 00.30 horas, esta mujer y el otro integrante del grupo volvieron a sus respectivos domicilios. Sin embargo, la perjudicada, «en un estado de sopor, somnolencia y agotamiento», se quedó dormida en la cama con la ropa puesta. El procesado, que también se quedó dormido en la misma cama, se despertó de madrugada y «aprovechando» que la joven estaba dormida y se encontraban solos, «le quitó la ropa, la colocó boca abajo y le penetró vaginalmente» sin que ella se percatara de lo que estaba sucediendo, «al menos totalmente, ni en todo caso pudiera reaccionar para evitarlo u oponerse a ello», ya que «no fue hasta la mañana cuando al despertarse comenzó a ser consciente de lo ocurrido al encontrarse completamente desnuda con el procesado a su lado, por lo que se marchó de la vivienda.
El acusado, por su parte, ha reconocido que aquella noche sí mantuvieron relaciones sexuales pero ha insistido a lo largo de toda la sesión que fueron «consentidas». «Todo pasó al amanecer porque se veía el sol entrando por mi ventana y ella estaba consciente. De hecho, fue ella la que se subió encima de mi y luego yo le pedía cosas y ella accedía a hacerlas», ha añadido. En palabras del joven, «creo que ella la ha tomado contra mí porque yo en ese momento tenía novia. Me preguntó a ver si podía llevarse la camiseta que le había prestado, pero le dije que no porque creí que podía utilizarla en mi contra y se enfadó».
Una mañana «de pira»
El segundo episodio tuvo lugar el 2 de octubre de 2020. Una amiga del acusado, de 18 años, quedó en ir a su casa a las ocho de la mañana tras hacer «pira» las primeras horas de clase. Según la víctima, una vez en la habitación, este le insistió para que la joven bebiera abundantes bebidas alcohólicas y fumara «3-4 porros» de marihuana. El exceso de los consumos provocó que la joven quedara aturdida, mareada, momento en el que ella misma empezó a desabrocharse los botones de la camisa que llevaba. «Cuando estaba para quitarme el último botón él se puso a ayudarme, o eso pensaba, y le dije que parara. Después me desmayé y ya no recuerdo más», ha explicado.
Al parecer, el procesado, «sin el consentimiento de esta», la desnudó y se puso encima de ella para violarla. «Cuando me desperté tenía la camisa completamente desabrochada y en la parte de abajo no llevaba nada. Lo único que sé es que yo no me la había quitado. En cuanto él terminó, yo me vestí y me fui de su casa».
Durante el juicio la joven ha indicado que nunca antes habían mantenido relaciones sexuales, un hecho que el procesado ha negado rotundamente al indicar que «nosotros solo quedábamos para eso». Además de los 14 años de prisión, la Fiscalía pide para él ocho años de libertad vigilada una vez abandone la cárcel y otros tantos de orden de alejamiento sobre las víctimas. Asimismo, deberá indemnizar a cada una con 6.000 euros.
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