Cuarenta días sin aparcar el paraguas que dejan los pantanos bien cargados en Gipuzkoa

Las lluvias han sido intensas en muchos puntos del territorio durante la madrugada y la primera mitad de este sábado, pero todo indica que la meteorología irá mejorando y que las últimas horas de hoy y todo el domingo dará una tregua la lluvia.

Según datos de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), en Azpeitia se han contabilzado hasta media mañana 27 litros por metro cuadrado. Una cifra solo superada por las localidades cántabras de San Roque de Riomiera (35) y Santillana del Mar (37). Zumaia e Irun ocupan la octava y décima plaza de este ranking, con 24 y 22 litros por metro cuadrado respectivamente.

Diciembre continúa así la estela de un noviembre marcado por las lluvias, en el que apenas hubo entre 4 y 5 días completamente secos. De hecho, en la presa del Añarbe se han llegado a acumular 355 litros por metro cuadrado, cuando el promedio para este mes es de 259. En estos momentos, el embalse se encuentra al 81% de su capacidad y el pasado 22 de noviembre ya se realizó un desembalse preventivo para poder dejar espacio para futuras precipitaciones.

Otros pantanos guipuzcoanos, como Aixola o Barrendiola se encuentran al máximo de su capacidad mientras que Lareo (79,7), Ibai-Eder (93,09) y Arriaran (77,56) están entre un 20% y un 30% más llenas que hace un año por estas mismas fechas, un alivio después de que el verano algunos de ellos entrasen en fase de prealerta por sequía.

Aproximadamente, en las últimas dos semanas el ritmo de llenado de los embalses guipuzcoanos alcanzaría una cifra apoximada de 2.000 millones de litros de agua. Y hablamos de que el consumo no se ha detenido en ningún momento, por lo que habría entrado más del doble de esa cantidad de agua en los pantanos.

¿Y esa cifra es mucho o poco? Se calcula que mil millones de litros de agua, un hectómetro cúbico, supone el consumo aproximado de unas 15.000 personas en todo un año, por lo que el agua que ha caído en las últimas semanas ha sido más que bien recibida.

En lo que respecta a la previsión meteorológica pura para esta tarde de sábado y el domingo, se espera que tras una mañana tormentosa las precipitaciones vayan remitiendo y la nubosidad no estará tan cerrada, ya que se van a ir abriendo claros.

Mañana será un día prácticamente sin precipitaciones. La jornada comenzará con temperaturas bajas, incluso con heladas en puntos del interior. También es muy probable que se forme algo de niebla. El ambiente, en general, va a ser luminoso, pero no con los cielos limpios del todo ya que se van a ir colando algunas nubes altas. Hacia el final del día la nubosidad irá en aumento y podría llover algo por la noche. El viento predominante será el de componente sur, viento que ganará en intensidad hacia el final del día. Las temperaturas máximas subirán, sobre todo en la vertiente cantábrica, impulsadas por el viento sur.