El ocio nocturno avisa de que «si nos cierran será peor; habrá botellones»
El sector critica la posible supresión de cotillones y se pregunta si «no es más peligroso que la gente se junte sin control que en recintos donde se pide el pasaporte Covid»
El anuncio de un previsible cierre por Nochevieja cayó ayer como un jarro de agua fría en hoteles, restaurantes y establecimientos de ocio nocturno, ... muchos de los cuales tienen ya organizadas cenas, fiestas y cotillones para despedir el año. A la espera de comprobar si el LABI confirma esta tarde lo que ayer dejó entrever el lehendakari, ahora temen verse en la tesitura de tener que devolver entradas, cancelar contratos y, en el peor de los casos, asumir las pérdidas por el género encargado y las inversiones realizadas para la última noche del año. El sector estalló ayer en una ola de ahogada indignación, pues una mayoría de empresarios y representantes hoteleros y hosteleros eludieron reaccionar públicamente al anuncio hasta ver qué decide hoy el LABI. Pero en privado, la coincidencia era total en denunciar tanto el fondo como la forma en que parece se van a ver obligados a afrontar la Nochevieja.
Respecto a la forma, nadie entiende que se haya esperado a la última semana para decidir que es posible que no haya fiestas de fin de año. «Llevamos semanas con la sexta ola. Con haberlo anunciado la semana pasada se habrían evitado muchos problemas, quebraderos de cabeza y pérdidas económicas», resume un hostelero.
Por encima del cuándo, enoja el qué, el fondo de la cuestión. «Siempre somos los mismos los paganos», coinciden todas las fuentes consultadas, que también comparten que impedir cotillones «no es la solución. Lo vimos en verano. Si cierran los locales, la gente se va a ir a otros lugares a hacer botellón, ya sea en la vía pública o en casas particulares». «¿Qué es más efectivo, tener a la gente en un local bien ventilado en el que se pide el pasaporte Covid, o decenas de botellones descontrolados en los que la gente interactúa igual y se desconoce si el de al lado está vacunado, ha superado la enfermedad o tiene una prueba negativa?», se preguntan. Así las cosas, el sector estará atento hoy a conocer las medidas al detalle para saber cómo actuar. Es el caso de Mikel Román, de la sala de conciertos Doka en San Sebastián. Resalta que dadas las incertidumbres «este año hemos esperado hasta última hora para organizar la fiesta de Nochevieja. Lo habitual es anunciarla mes y medio o dos meses antes, y esta vez no lo hemos hecho hasta el 17 de diciembre. Pensábamos que si quince días antes el Gobierno Vasco no había dicho nada, es que no la cancelaría». En su caso, debería devolver las 250 entradas que tiene vendidas, paralizar pedidos, asumir costes irrecuperables (impresión de entradas, cartelería, promoción de la fiesta...) y ver cómo gestionar el personal extra contratado para esa noche.
Además de Nochevieja, el Doka puede verse afectado por una eventual reducción de aforos y horarios. «El jueves tenemos un concierto a las 19.30h. Por horario podríamos mantenerlo, pero teniendo vendidas todas las entradas como tenemos, si reducen el aforo a la mitad, ¿a quiénes se las mantengo y a quiénes no? Es todo un sinsentido», censura.
Otro recinto habitual para fiestas de fin de año es el Café Irun. Su responsable, Iñaki Galarza, ya tenía dudas sobre si «seríamos capaces de llegar a Nochevieja» y decidió no organizar este año cena ni cotillón. «Es mejor no vender que comprar el género y perderlo», resume. «Quizás el Gobierno Vasco ha apurado demasiado y habría que haber tomado la decisión antes».
Una hoja de ruta consensuada con las comunidades limítrofes
A la espera de las medidas concretas que hoy dictamine el LABI, Euskadi, Asturias, Cantabria, La Rioja, Navarra y Aragón acordaron ayer ir de la mano en la adopción de restricciones, aunque cada una de ellas las adaptará a su situación pandémica. Así, Asturias ya ha decidido clausurar el ocio nocturno, como Cantabria, y situar a la 01.00 horas el cierre de bares y restaurantes, al igual que ha planteado Navarra. Aragón, por su parte, lo sitúa en las 2.00 para las discotecas y las 0.00 para el resto de la hostelería.
Los gobiernos vasco y navarro ya habían avanzado los días previos que iban a consensuar medidas en aras a que las limitaciones fuera más efectivas dada la movilidad entre comunidades estas fechas. Ayer se sumaron más actores.
El Gobierno de Aragón publicó ayer mismo la orden acordada por los titulares de Sanidad de Aragón, La Rioja, País Vasco, Navarra, Asturias y Cantabria, donde han aumentado notablemente los casos de covid en los últimos días. Cada comunidad introducirá en sus respectivas órdenes los matices que considere necesarios. Las comunidades mencionadas han alcanzado un acuerdo porque comparten la ubicación geográfica, la situación epidemiológica, las dinámicas sociales y las características de la población infectada», con «cifras muy altas» de contagios.
Así, el Gobierno de Navarra ha decidido establecer el cierre de establecimientos, sociedades y peñas entre la 1 y las 6 horas. Además, se prohibirá el consumo en barra y se extenderá el uso del certificado Covid a residencias, hoteles o gimnasios. La nueva Orden Foral 63/2021 de la consejera de Salud fue enviada ayer al Tribunal Superior de Justicia de Navarra y de contar con su aval entraría en vigor el día de su publicación en el BON, estando vigente hasta el 14 de enero incluido. Euskadi, en cambio, no va a consultar esta vez a los jueces.
Navarra tiene una incidencia a 14 días que supera los 2.200 casos por cada 100.000 habitantes. Por ello, el Ejecutivo foral ha decidido establecer la obligatoriedad del consumo sentado en mesas para un máximo de 10 personas, horarios de cierre en interiores a la 1 y la regulación de eventos específicos de carácter social, cultural y deportivo, así como actividades navideñas.
Por otro lado, el Gobierno de Navarra ha decidido ampliar la petición del pasaporte covid para las residencias y centros sociosanitarios. En Aragón los establecimientos hosteleros cerrarán a las 00.00 horas y la ocupación máxima será también de 10 personas por mesa tanto en interior como en exterior. El ocio nocturno cerrará a las 2.00 horas y señala que los cotillones se podrán celebrar. En eventos multitudinarios podrá haber hasta 250 personas en interior.
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