Se confirma la estación soterrada de Vitoria, que deja a Donostia como única en superficie

El visto bueno a la declaración de impacto ambiental de las obras en Vitoria tiene como consecuencia directa la confirmación de que la llegada, salida y estación del Tren de Alta Velocidad (TAV) en Vitoria será bajo tierra, como la de Bilbao. De este modo, San Sebastián queda como la única capital vasca cuyas vías y terminal se mantendrán en superficie.

La parte positiva es que mientras la estación de Donostia estará operativa ya a finales del año que viene, antes incluso de que el servicio de alta velocidad esté activo (en 2028 como pronto), y como tal dotará a los usuarios de Cercanías, Media Distancia y Largo Recorrido de una instalaciones modernas y más funcionales que las de la antigua estación de Atotxa, en Bilbao y Vitoria los trenes de alta velocidad llegarán durante los primeros años a estaciones provisionales, ya que las definitivas no estarán concluidas para cuando el TAV entre en servicio.

Por el otro lado, el soterramiento de la infraestructura ferroviaria liberará en Vitoria y Bilbao decenas de miles de metros cuadrados para planeamientos urbanísticos y/o disfrute ciudadano. Serán 90.000 en la capital alavesa y 130.000 en la vizcaína. San Sebastián, por su parte, apenas ganará una nueva plaza sobre las vías de 5.723 metros cuadrados, que se construirá sobre los andenes y que conectará directamente la estación con el edificio de Tabakalera.

En Vitoria aún no se ha decidido qué se va a hacer en ese espacio. En Bilbao, sí. El nuevo barrio de Abando tendrá seis rascacielos que albergarán «entre 1.000 y 1.000 viviendas», un gran parque central, dividido a su vez en pequeñas «plazoletas verdes de barrio», que supondrá la plantación de un millar de árboles, y diversos equipamientos públicos.

Respecto a la inversión, la nueva estación de Atotxa va a costar algo más de 90 millones de euros, mientras que en las de Vitoria y Bilbao se invertirán 555,5 y 495,7 millones, respectivamente.