Gipuzkoa recibe el primer embate de 'Louis'

Estaba más que anunciada, pero la borrasca 'Louis' irrumpió con tanta fuerza y tan de repente que sorprendió a los guipuzcoanos, que en apenas unos minutos pasaron de disfrutar del ambiente soleado a correr a refugiarse de la lluvia y el viento. En apenas media hora, en Donostia el termómetro bajó 9 grados, se recogieron 6 litros de lluvia por metro cuadrado y el viento, que ya soplaba fuerte desde primera hora, registró rachas de 100 kilómetros por hora. Un aperitivo de lo que serán los próximos días, en los que estarán activos los avisos por oleaje y por nieve (sí, nieve), que podría caer por debajo de los 1.000 metros, a una cota cercana a los 700.

A las 14.20 horas de este jueves, aunque el viento era fuerte, aún brillaba el sol. La temperatura era de 19,6º en San Sebastián, y el nivel de irradiación era de 569. En apenas 20 minutos el cambio fue drástico. La irradiación se desplomó a 38, la temperatura bajó a los 10,9º y la lluvia caía con fuerza, azuzada por las rachas de viento, que llegaron a los 101 km/h en Jaizkibel, a los 91 en Miramón o 97 en Zizurkil. En el interior del territorio 'Louis' también llegó con ganas, y en Arrasate el mercurio registró un descenso de 7º en media hora y acumuló 5,7 litros.

Quien había sido previsor abría el paraguas, aunque le duraba poco y, ya rotos, se acumulaban en suelos y papeleras. El resto llegó calado allá donde fuera.

Con el paso de las horas el cambio fue aún más acusado. En apenas cuatro horas, el termómetro marcaba 7º, lo que supone un descenso de 12º. En la costa es donde más lluvia cayó, especialmente en Pasaia y en la zona del Añarbe.

Se espera que la borrasca provoque «una situación invernal» en Euskadi ya que favorecerá la llegada tanto de una masa de aire frío, como de frentes nubosos. Las condiciones meteorológicas predominantes hasta el domingo serán vientos intensos del oeste, chubascos, posibles tormentas y granizo, así como nieve que podría cuajar en cotas por debajo de los 1.000 metros de altitud. Algo que están esperando muchos y que este invierno ha brillado por su ausencia.

Además de fuertes precipitaciones, el frente traerá olas de más de 7 metros el sábado. Se ha ampliado hasta ese día el aviso amarillo, y durante algunas horas habrá alerta naranja, por riesgo marítimo costero, principalmente en las pleamares. Además, preocupan de cara a los próximos días las rachas de más de 100 km/hora.

Este viernes el día vendrá marcado por el descenso acusado de las temperaturas y los chubascos. Las precipitaciones serán más frecuentes durante la segunda mitad del día y sobre todo en el norte y es probable que se produzcan algunas tormentas que podrían dejar algo de granizo; durante la primera mitad los chubascos serán más ocasionales y en la mitad sur no se esperan precipitaciones. Las temperaturas máximas se situarán por debajo de los 10º y la cota de nieve podría situarse en torno a 800 metros. A todo esto, habrá que añadir el viento de componente oeste que será algo intenso, sobre todo en la costa, y que hará más desapacible el ambiente.

Este sábado habrá un ambiente frío y viento intenso del oeste, acompañado por chubascos, que serán más frecuentes en el norte, con todavía riesgo de alguna tormenta por la mañana. En la mitad sur, los chubascos serán más débiles y dispersos. Viento del oeste, fuerte en el litoral, donde destacará la mala mar. Las temperaturas irán en descenso, con una cota de nieve que bajará hasta los 600-700 metros por la mañana, pero subirá hasta los 1.000 metros por la noche.

En cuanto a los avisos meteorológicos, desde este viernes y hasta el sábado a las 15.00 está activa la alerta naranja, con olas cuyas alturas significantes podrían alcanzar los 5 metros. Asimismo, se activará la alerta naranja por impacto en costa durante las dos pleamares de este sábado, entre las 03.00 y las 07.00 horas y entre las 15.00 y las 19.00 horas. En cuanto al impacto de ola en la costa, estarán activos avisos amarillos durante las pleamares, así como por proyecciones de agua y salpicaduras desde este mediodía hasta las 15.00 horas del sábado.

Por otro lado se ha activado el aviso amarillo por nieve en el interior desde este viernes a las 12.00 hasta las 15.00 horas del sábado. Se espera que la cota de nieve ronde este viernes los 800 metros, pudiendo descender hasta los 700 metros a lo largo de la madrugada del sábado, manteniéndose así hasta las últimas horas del día. Los espesores estimados podrían oscilar entre los 2 y los 20 centímetros a 1.000 metros de altitud, siendo menores en las montañas del sur del territorio.

Esta situación afectará no solo a Euskadi, sino también a Iparralde y a toda la península. Además el domingo se espera la llegada de una nueva borrasca atlántica, que podría ser nombrada como 'Monica' y que sería la decimotercera de la temporada. Llegará desde el noroeste y su núcleo podría tocar tierra entrando por el oeste de Francia. Un frente cálido asociado a la borrasca dejará lluvias en todo el norte, y las temperaturas subirán ligeramente, así como lo harán las cotas de nieve. También dejará fuertes rachas de viento que se notarán durante la tarde del domingo, con rachas que podrían alcanzar los 90 km/h en el norte.

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