Bidegi aprueba este viernes un plan de descuentos para los peajes en las vías de pago guipuzcoanas

Lo que ya está encarrilado es que habrá descuentos para los vehículos pesados, que serán mayores para los menos contaminantes y que las rebajas también se aplicarán por la frecuencia de uso de las carreteras. Como referencia, la Diputación de Bizkaia anunció hace dos semanas que rebajará un mínimo de un 10% el precio de los peajes para camiones en la AP-8 y la Supersur a partir del 1 de enero, y que el descuento por frecuencia de uso alcanzará el 13%. Además, los camiones con sello ecológico verán recortada la tarifa hasta un 25%. Estas medidas pueden ir en la línea del plan de descuentos que ultima Gipuzkoa, aunque desde el departamento de Infraestructuras Viarias ya apuntaron que la intención es «ir un poco más allá». La incógnita no se resolverá hasta este mediodía, cuando la diputada Aintzane Oiarbide y el director general de Bidegi, Alfredo Etxeberria, comparecerán en el Palacio foral para dar cuenta del plan de descuentos.

Estas rebajas en los peajes se aprobarán en la misma reunión en la que Bidegi ratificará la subida de un 2,25% en todos los peajes de Gipuzkoa de cara a 2023. Es el incremento mínimo que se acordó con los bancos que financiaron las grandes carreteras del territorio, y se ha desvinculado del alza de un IPC desbocado para reducir el impacto en los bolsillos de todos los conductores.

Gipuzkoa ha sido punta de lanza en la implantación de peajes para camiones en todas sus vías de alta capacidad y, a principios de 2023, los implantará en la N-I y la A-15, pero los territorios vecinos ya se preparan para seguir su senda. Bizkaia implantará nuevos peajes el próximo enero y ayer Navarra avanzó que también lo hará de forma progresiva desde finales de 2023. El Gobierno foral prevé empezar por la A-1; seguir por la A-68 a mediados de 2024; la A-15 y la A-10 a finales de 2024, y la N-121-A a finales de 2026.