Se abre el debate de los detectores de metales en las discotecas vascas
El alcalde Vitoria pide que la seguridad de los locales nocturnos pueda «utilizar detectores», aunque en el sector y entre los profesionales de vigilancia hay dudas
El alcalde de Vitoria, Gorka Urtaran (PNV), no se limitó ayer a condenar la agresión con arma blanca contra cuatro personas que un joven de ... 21 años cometió la madrugada del sábado en una discoteca de la capital alavesa, sino que defendió «tomar medidas» contra el aumento de las armas blancas en el ocio nocturno. Entre ellas, propuso «endurecer las sanciones por llevar un cuchillo o una navaja de fiesta» y también puso sobre la mesa un debate que podría coger fuerza: ¿Deberían contar las discotecas vascas con detectores de metales para evitar la entrada de armas blancas?
Urtaran, que además de alcalde de Vitoria es presidente de Eudel, tiene claro que es una posibilidad que hay que valorar. «Habría que tener en cuenta aquella medida que plantearon en el ocio nocturno de Madrid, para que en la seguridad de las discotecas se puedan utilizar detectores de metales», al igual que se hace en algunos países europeos.
La propuesta, sin embargo, tiene sus aristas. Si el detector de metales es un elemento fijo tipo arco -como el que hay a la entrada de edificios institucionales, aeropuertos o bancos-, «la ley estatal de Seguridad Privada obliga a que estén controlados por personal acreditado de seguridad privada», apunta Endika Bernaola, presidente del Colectivo Independiente de Seguridad Privada de Euskadi (Cispe). Añade también que si el control se realizase mediante una pala detectora de metales, el personal de seguridad con el que cuentan la mayoría de las discotecas vascas no estaría autorizado para cachear a los clientes o para obligarles a mostrar lo que llevan en los bolsillos.
En el propio sector de la hostelería hay muchas dudas sobre la viabilidad de extender esta medida. Fuentes de la Asociación de Hosteleros de Gipuzkoa prefieren no pronunciarse hasta mantener una reunión con la Er-tzaintza para revisar los protocolos de seguridad que han solicitado desde hace mes y medio, y para la que «aún no tenemos fecha». En Bizkaia, mientras, algunas discotecas, como la sala Moma, han avanzado su intención de instalar detectores.
Propietarios de locales nocturnos guipuzcoanos como Iñaki Galarza, del Café Irun, admiten que «algo hay que hacer» para atajar el problema de las armas blancas, «pero no sé si poner detectores sería la solución. Le tenemos que dar una vuelta entre todos», defiende.
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