Casi 28.000 dependientes usan el servicio de teleasistencia en Gipuzkoa

Casi 28.000 dependientes utilizan el servicio vasco de teleasistencia en Gipuzkoa y cerca de 80.000 en Euskadi. Cada vez son más las personas que recurren a BetiON. Es más, el número de usuarios ha aumentado en unos 10.000 en apenas un año en el conjunto del País Vasco, según datos ofrecidos por el Departamento de Bienestar, Juventud y Reto Demográfico este martes, coincidiendo con la visita del lehendakari Imanol Pradales y la consejera Nerea Melgosa a la sede del servicio, en el barrio bilbaíno de San Ignacio.

El servicio vasco de teleasistencia se ha convertido en una herramienta de asistencia clave en una sociedad que envejece por momentos. Los 200 profesionales que trabajan en BetiON atienden cada día más de 1.300 alarmas, esto es, casos de personas que solicitan su ayuda porque se han caído o porque se encuentran indispuestos, entre otras cosas. Este servicio aboga así por ofrecer una teleasistencia predictiva para la atención y la prevención y detección de riesgos. Este servicio de atención telefónica está en marcha las veinticuatro horas del día y todos los días del año, y es atendido por personas «específicamente preparadas» para dar respuesta adecuada a situaciones de emergencia o necesidad social.

Más de la mitad de las mujeres mayores de 85 años de Euskadi son usuarias de betiON, 29.469 de un total de 58.046 (el 51%). Es más, tanto en el País Vasco como en Gipuzkoa la mayoría de personas que utilizan esta medalla son mujeres. En el territorio, por ejemplo, 20.710 son féminas, frente a los 7.166 hombres. Así, el perfil medio de persona usuaria es el de una mujer de más de 80 años. La edad promedio de entrada al servicio es precisamente esa y el tiempo de permanencia es de seis años, antes de abandonar el hogar para ir a una residencia, en muchos casos.

Cada día la sede de BetiON recibe más de 1.300 alarmas o emergencias de los distintos domicilios atendidos y el promedio mensual es de 41.000 llamadas recibidas. Estos avisos vienen de los diferentes dispositivos que tienen instalados en los hogares, donde además de la tradicional medalla colocan detectores de humo y fuego, de gas, de caídas y de movilidad, entre otros. En total, hay distrubidos por el conjunto de hogares vascos 13.150 dispositivos; la mayoría (67%) detectores de humo y fuego que alertan con sonido del riesgo en el propio domicilio y que emiten también una llamada a BetiON. Además, cada día se atienden más de 230 intervenciones técnicas, como instalaciones de alta o averías urgentes.

La teleasistencia, en la que cada mes se producen de media 1.200 nuevas altas y 800 bajas, está pensada sobre todo para mayores de 75 años que viven solos, aunque también está abierta a mayores de 65 o en riesgo de dependencia, con la dependencia reconocida y en riesgo de aislamiento social.