Receta de pulpo 'a la parrilla' de Martín Aristondo

Con la patata previamente cocida, se pone sobre una sartén para ir rompiéndola, poco a poco, con ayuda de un tenedor y echándole un poco de aceite de oliva y dándole un toque de sal. Según se vaya trabajando, iremos viendo cómo la textura cambia completamente a una patata cremosa. Hay que tener mucho cuidado de que no se agarre.

En una sartén antiadherente, colocar un chorrito de aceite de oliva y poner a cocinar la pata de pulpo cocida. Al no tener parrilla, el truco para darle ese matiz del característico sabor a brasa será echarle sal ahumada, en muy poca cantidad, ya que su sabor es muy potente.

Con diferentes opciones de punto, que podrá elegirse al gusto, cocinamos el vuelta y vuelta durante un par de minutos, hasta que quede dorado. Una vez retirado del fuego, trinchamos el pulpo y podremos comprobar que está jugoso.

A la hora de servir, será tan protagonista el pulpo como la patata. Sobre un plato, colocar una base con la patata rota, sobre la que acomodaremos el pulpo. Sobre el mismo, añadiremos un poco de aceite de oliva, un toque de pimentón dulce y otro de sal. Para terminar, agregar unos brotes y unas perlas de aceite de oliva a modo de decoración.

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