Mertxe Aizpurua | Diputada en el Congreso por EH Bildu

Elecciones generales 2023

«No ponemos líneas rojas para formar un Gobierno de progreso»

- ¿Cree que Junts puede bloquear la formación de un Gobierno de coalición?

- Sí, desde luego. Es verdad que el panorama que tenemos para que el PSOE pueda formar Gobierno queda un poco endemoniado. De todas formas, nosotros creemos que es posible construir esa alternativa para poder continuar otros cuatro años el camino emprendido de avances sociales. Nosotras estamos preparadas para esto. Inclinaremos siempre la balanza hacia la izquierda y, en este sentido, por nuestra parte, haremos todo lo que estemos en nuestra mano para que esto pueda ser así.

- ¿Las exigencias de la formación catalana sobre autodeterminación y amnistía son un escollo para la nueva legislatura?

- Para formar un nuevo gobierno no solo se depende de Junts, también de bastantes más fuerzas como ERC, PNV o nosotros. En EH Bildu decimos que no vamos a dejar pasar a la derecha y esto va a ser así, pero siempre lo haremos con la voluntad de que se constituya un Gobierno de progreso. Eso es lo que le pediremos a Sánchez. Como cuando le dimos nuestra abstención en la anterior investidura. Nosotros no somos de poner líneas rojas para formar Gobierno, porque tenemos claro que la cuestión es que las derechas no lleguen al poder.

- ¿Harán de enlace entre Junts y Sánchez?

- El PSOE tendrá que hablar directamente con Junts. Trabajaremos para que se pueda construir esa alternativa a la derecha, que creemos que es necesaria en este momento. Además, los resultados de las elecciones han demostrado que en Cataluña y Euskal Herria la izquierda independentista somos el mejor dique de contención frente a los reaccionarios. En la fotografía del hemiciclo que se dibuja con estas elecciones, los partidos soberanistas tienen más pujanza y fuerza. El PSOE debe tomar nota de esto. Y sabrá tomar nota, supongo, porque de otra forma sería darse de bruces contra la realidad. También creo que hay que darle solución al tema de la territorialidad, aunque nosotros hemos dicho siempre que sin ansias y sin prisas, pero hay que dar pasos en ese camino.

- ¿Esperaban lograr sus mejores resultados en unas elecciones generales?

- Los resultados han sido excelentes. Confiábamos en que íbamos a mantener el grupo parlamentario y aumentar nuestra representación. Era factible lograr un segundo diputado por Bizkaia y entraba dentro de las posibilidades ser primera fuerza en Gipuzkoa, con los tres senadores por ser primeros. Además, hemos tenido la sorpresa de un senador más por Álava. Es mucho más de lo esperado. Hemos logrado un representante más en el Congreso y hemos pasado de dos a cinco en la Cámara alta. En Navarra los resultados también han sido muy buenos, donde nos hemos afianzado como segunda fuerza. El crecimientos sostenido de EH Bildu durante las últimas elecciones ha venido para quedarse y tras el 28-M esa tendencia se ha consolidado.

- ¿Se trata de un cambio de ciclo en la política vasca?

- Se está produciendo un cambio de cliclo político y cada vez crecemos más en número de votos. Unos apoyos que no son puntuales, porque se quedan con nosotros. No fallamos y no defraudamos a la gente. Hay muchas formaciones que han subido de golpe, pero también se han quedado sin esa fuerza de la misma manera.

- ¿Estos resultados se trasladarán a las elecciones autonómicas del año que viene?

- Esto no es algo puntual, sino que se trata de una situación estructural. Creo que las siguientes elecciones autonómicas también van a ir en esta misma línea.

- ¿Euskadi podría tener un lehendakari de EH Bildu?

- Ya veremos. Todavía tenemos que digerir lo que está pasando y ya veremos como quedan las cosas en el Estado. Lo que está claro es que EH Bildu es una fuerza pujante que tiene credibilidad, en la que la gente confía y eso se va a mantener. Nos hemos quedado a nada, a muy pocos votos de ser la primera fuerza política en Euskadi. Las elecciones generales son para nosotros las más difíciles históricamente. Pero esta vez se ha dado una conjunción de factores con los que hemos sacado un buenísimo resultados.

- ¿La abstención no les afectó en la cita del domingo?

- Hemos superado la abstención y además hemos aumentado el número de votos. Las únicas fuerzas del Estado que también han aumentado la cantidad de papeletas han sido el Partido Popular y el PSOE. Esto es muy significativo y creo que se mantendrá en las próximas citas con las urnas.

- ¿Qué supone para EH Bildu ser la fuerza abertzale más fuerte en el Congreso?

- Esperemos que se abra la oportunidad de formar un Gobierno progresista para trabajar en Madrid. Este verano se va a producir una intensa dinámica de acuerdos, aunque realmente está complicado. De todas formas, yo creo que que se va a conseguir. Confío en lograrlo porque hay una alternativa para poder continuar otros cuatro años mejorando la vida de la gente y cerrando la puerta a la ultraderecha. A partir de ahí seguiríamos en la misma línea que hemos trabajado durante la última legislatura, que ha sido la lucha por los avances sociales y afianzar derechos y libertades.

- Si no se logran los acuerdos, ¿qué puede pasar en una repetición electoral?

- Estamos preparados en Euskal Herria para eso. Si hay otra convocatoria electoral volveremos a estar ahí. Además, me atrevo a decir que tendríamos todavía mejores resultados. Porque habrá gente que ha visto que su voto no tiene ninguna traslación en diputados de esa fuerza política a la que ha apoyado. Y yo creo que ahí seremos recompensados otra vez. Eso sí, si hay repetición no será porque nosotros la empujemos. En el caso de que se diera esa situación yo creo que no saldríamos mal parados, todo lo contrario, creo que volveríamos a salir reforzados.

- ¿El voto útil le ha beneficiado a EH Bildu?

- Mucho voto que ha captado el PSOE ha sido de gente que antes estaba en la abstención. Ha sido producto de que han visto que había que frenar a las derechas y porque daba miedo el escenario que se podía dibujar. Eso ha movilizado mucho voto hacia los socialistas pero también ha venido a EH Bildu. Porque han visto que nosotros íbamos a hacer frente a la derecha. Se trata de un voto que se ha movido en las dos direcciones. Además, en las generales el PSOE suele tener mejores resultados que en cualquier otras elecciones. El voto útil se ha usado frente a ese miedo que puede atenazar la vida de los ciudadanos, porque todavía en la memoria colectiva está lo que ha supuesto un régimen fascista como el que tuvimos.

- ¿No conciben la posibilidad de un Gobierno de derechas?

- Lo descarto porque los números no les dan. Si tiramos de calculadora es imposible. No creo, en el peor de los casos, que si hubiese una nueva convocatoria electoral, ganase la derecha. Si es por EH Bildu no habrá un gobierno del bloque reaccionario español. La ciudadanía vasca ha hablado muy claro y no quiere un mandato que ponga en peligro nuestra lengua, nuestra cultura y nuestro futuro.

- En las próximas semanas tendrán que hablar con Sánchez. ¿Cómo van a ser esas negociaciones?

- Está en sus manos. Supongo que se pondrán manos a la obra y nosotros afrontamos esas conversaciones con responsabilidad y con seriedad, sin hacer ruido. Tras recoger las acreditaciones del Congreso celebraremos el Pleno de constitución y partir de ahí empezarán las negociaciones con los socialistas.