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Casi 3.000 toneladas de bonito en apenas una semana
Los barcos que participan en la costera han realizado el doble de capturas que en el mismo periodo que la campaña anterior, por la proximidad de la especie a la costa
Abundancia de piezas y muy cerca de la costa, ese sería el balance del inicio de la campaña del bonito para los arrantzales vascos. Y ... fiel reflejo de ello son las cifras de este miércoles. La flota bonitera vasca ha registrado una importante descarga de túnidos esta mañana. A primera hora de la mañana se han descargado 159 toneladas en Getaria, donde el lunes se descargaron otras 170. En Hondarribia se han apuntado 150 toneladas y en Ondarroa dos barcos han procedido a desembarcar 48.
Los barcos que participan en la costera llevan realizadas ya el doble de capturas que el pasado año para finales de junio del 2022. En total llevan descargados los barcos del Cantábrico y Noroeste, en muy pocos días de faena, 2.896.303 kilos, esto es, cerca de 3.000 toneladas. El tope se encuentra en 18.805 toneladas, por lo que hasta la fecha ya han consumido el 15,4% de las capturas autorizadas.
No obstante, no todo son alegrías. El conservero no está comprando tantas piezas y los precios son «bajos entre 3,30 a 3,60 euros la especie de talla media-grande», expresó el presidente de la Cofradía de Getaria, Emeterio Urreisti.
En este momento, los cardúmenes se encuentran cerca de la costa de Cantabria y el País Vasco, con lo que los barcos no deben alejarse en exceso para pescar. Los barcos del bonito arrancaron la campaña hace una semana, después de que se alcanzase el 90% del consumo de la cuota la anchoa, teniendo que desplazarse hasta la zona de Cantabria en donde han transcurrido las primeras faenas.
La campaña de 2022 finalizó con 17.000 toneladas capturadas entre junio y octubre. Es decir, el curso finalizó en los meses habituales. Cabe recordar que la del 2021 acabó el 16 de agosto; la de 2020 finalizó el día 19 de agosto; la campaña del 2019, el 27 de agosto; y la del 2018, el día 23. En 2017 se cerró el 13 de octubre; y en 2016, el 5 de ese mes, época hasta ese momento habitual.
La costera recibió una valoración «positiva» por parte del presidente de la Federación de Cofradías de Gipuzkoa, Eugenio Elduayen, aunque el «mejor precio» vino acompañado de un mayor gasto de gasoil. «En total cada barco grande tuvo que gastar 40.000 litros de gasoil más que el año anterior con lo que el mayor ingreso por el precio se compensará en parte con un mayor gasto». Este curso, hasta la fecha, la cercanía del bonito a la costa está permitiendo que ese gasto sea inferior.
La costera del pasado año se caracterizó por el desplazamiento del túnido a la zona de Asturias y Galicia, en donde se realizaron las descargas para después comercializarlas en los puertos de cada embarcación. Esto obligó a la flota a realizar un mayor consumo de gasoil en búsqueda de la especie.
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