Los trabajadores vascos cobran de media 831 euros menos al mes que los alemanes

Un dato llamativo donde los haya y que echa más sal en la herida, teniendo en cuenta el debate surgido en las últimas semanas al hilo del informe del Instituto Vasco de Competitivad, Orketra, en el que uno de sus autores ponía en el acento en la sobrecualificación de los trabajadores vascos y también cuestionaba la disposición de los empresarios a pagar los sueldos necesarios para retener o atraer el talento que demandan.

Posteriormente, un estudio de Lanbide sobre los sueldos que perciben los licenciados vascos a los tres años de entrar en el mercado laboral, y publicado por este periódico el pasado domingo, evidenciaba que todavía siguen cobrando menos que antes de la crisis. En concreto, 1.521 euros netos al mes por catorce pagas. Casi un 2% inferior a los 1.580 euros que cobraban en Euskadi en 2009 los egresados en 2006.Un informe al que aludió el presidente de Confebask, Eduardo Zubiaurre, unos días antes para destacar los sueldos abonados por las compañías vascas.

Pues bien, el informe de Adecco Group Institute -centro de estudios y divulgación de la empresa líder en recursos humanos- realizado con datos del INE y Eurostat y publicado ayer, señala que la remuneración de los trabajadores vascos es de 1.963 euros brutos al mes tras crecer un 1,7% en el último año. Pese a ello, se agranda la distancia respecto a la media de la UE-28, que es de 2.091 euros, 91 más que el año anterior, lo que supone un aumento del 4,55%. De este modo, la diferencia entre los salarios vascos y los de la media de la UE es de 128 euros. Hace dos años la remuneración vasca estaba por encima de esa media europea.

A pesar de esa desventaja, el País Vasco se sitúa en una posición intermedia, ya que hay dieciséis países europeos -además del conjunto de España- cuyos salarios medios son inferiores a los de Euskadi, mientras que los restantes once tienen remuneraciones medias mayores.

En el grupo de cabeza se encuentran Dinamarca, Luxemburgo y Alemania, por ese orden -ver gráfico adjunto-. Comparados con los daneses, los vascos cobran 1.187 euros brutos menos al mes. Y si nos fijamos en los alemanes, un país que suele servir de referencia cuando se habla de competitividad de las empresas vascas y también de los salarios, la distancia es de esos 831 euros antes mencionados, lo que supone 9.972 euros al año.

Eso implica que la remuneracíon vasca es un 29,8% inferior a la germana, una distancia que se ha ampliado además en 0,8 puntos porcentuales en el último año, según destaca el estudio de Adecco. Esa diferencia significa que un asalariado vasco necesita trabajar 17 meses para tener un ingreso similar al que tiene un empleado alemán en un año.

La comparación es algo más favorable respecto de Francia, aunque aún así la diferencia es de 452 euros mensuales (5.424 euros al año), lo que supone que el salario vasco es un 18,7% inferior al francés. La diferencia también se emplía en 26 euros en el último año.

El sueldo medio vasco sale, asimismo, bien parado si se compara con la media española, que es de 1.658 euros al mes, es decir, 305 euros más. En este caso, la brecha también se ha ampliado para bien de los trabajadores vascos, ya que el sueldo medio español ha crecido en el último año un 1,2%, medio punto menos que el de los asalariados de Euskadi. Si se compara el sueldo de los españoles con el de la media de la UE, la diferencia es de 433 euros mensuales. Y si la referencia es la de un asalariado alemán, un español necesita trabajar veinte meses para lograr los mismos ingresos que un germano en un año.

Los países peor parados son Bulgaria, Rumania y Lituania. Así, el dinero percibido por un trabajador búlgaro al cabo de un año es similar a lo que cobra uno vasco en dos meses y medio. La comparativa es también muy favorable en relación a Portugal, cuyo salario medio es de 997 euros, casi la mitad que el de Euskadi. La conclusión del informe es que la situación de los salarios vascos es ventajosa en relación con los países del Este de Europa, pero desfavorable respecto de los países más avanzados.