Cuatro de cada diez guipuzcoanos tienen un seguro de decesos, la cifra más baja en doce años

Unespa, la patronal del sector asegurador en España, que representa a casi 200 aseguradoras y reaseguradoras, disecciona para DV la situación general de los seguros de decesos. Tras el del automóvil, que a cierre de 2023 contaba con 33,4 millones de pólizas –es de suscripción obligatoria–, el de decesos es el que tiene una mayor cantidad de asegurados en España, según Unespa, con 22,3 millones, el 46% de la población.

Unos guarismos que califican como «particularmente meritorio» porque se trata de un seguro de suscripción voluntaria. «Estas pólizas gozan de gran aceptación y presencia social por su carácter familiar, ya que varios miembros de una misma familia suelen estar cubiertos bajo un mismo contrato», precisan.

Otros seguros que están muy extendidos son los de hogar, vida riesgo y salud. En España había 21,4 millones de viviendas aseguradas al finalizar el pasado año. Además, 21,1 millones de personas tenían un seguro de vida riesgo. Por su parte, el seguro de salud daba cobertura a otros 12,4 millones, según datos proporcionados por la patronal aseguradora.

Ante la creencia de que la muerte puede estar lejana, los expertos consultados subrayan que es «recomendable» adoptar una serie de pasos para afrontar la «realidad biológica» del fallecimiento. Ante la inevitabilidad del adiós, desde Unespa aconsejan tratar la muerte «con naturalidad», hacer testamento, expresar tus últimas voluntades –donar órganos o no–, recopilar tus datos patrimoniales e información legal para que tus seres queridos los tengan localizados –escrituras de propiedad, contratos de alquiler, información bancaria, pólizas de seguro, planes de pensiones...– elegir dónde reposar y decidir sobre el fin de tu identidad digital, entre otras cuestiones.

Mapfre es una de las compañías estatales que ofrece este seguro. Fuentes de la empresa aseguran que es «complicado» establecer un precio generalizado o hablar en términos de 'desde', porque la prima de este seguro va «en función del capital de servicio y de la edad del asegurado». Con todo, ponen como ejemplo un seguro contratado para un menor recién nacido, «con un capital de 2.715 euros y un servicio de incineración estándar, se establecería una prima de 44,56 euros anuales, sin cobertura dental».

 La irrupción de la digitalización también ha entrado de lleno en este sector, ya que Mapfre ofrece la posibilidad de consultar cualquier duda a un profesional a través de un chat médico «disponible las 24 horas del día y los 365 días al año. También video-consultas inmediatas y el servicio 'Tu médico te llama' para hablar con él durante 15 minutos desde cualquier parte del mundo».

La aseguradora, además, sigue incluyendo los servicios tradicionales funerarios, adaptados a los deseos de cada asegurado y a las costumbres locales, asistencia a personas –coordinación de las prestaciones, consulta jurídica familiar, tramitación de documentos por fallecimiento–, traslados para la inhumación al cementerio elegido en cualquier parte de España, asistencia en viaje y otros gastos extraordinarios. «Igualmente, también se puede acceder a la elaboración del testamento, gestión documental de la herencia...», explican.

En Laboral Kutxa, que atesora 13.900 asegurados con estas pólizas, comenzaron a comercializar este producto en 2015. Fuentes de la entidad financiera explican que cuentan con dos modalidades. Una es la denominada básico o esencial, el que tienen para toda la población. Y después está el Básico Prima Única o Esencial Prima Única, que es para los interesados en estar asegurados que superen los 60 años de edad. Un seguro de decesos de prima única es un tipo de póliza de seguro diseñada para cubrir los gastos relacionados con el fallecimiento de una persona.

A diferencia de los seguros de prima periódica –como mensual o anual–, donde el asegurado paga primas regularmente a lo largo del tiempo, en un seguro de decesos de prima única se paga una suma única de dinero en un solo pago al comienzo del contrato. Se trata de una modalidad de seguro de pago único cuyo precio se determina en función de la edad del asegurado en el momento de la contratación y también del capital fijado para la cobertura de decesos.

Así, según el tipo de familia las cuotas serán diferentes. Una persona de 55 años abonaría en Donostia una cuota anual de 104,99 euros, mientras que una pareja (de 45 y 50 años) pagaría 103,68 euros, y una pareja con dos hijos (matrimonios de 35 y 37 años y niños de 5 y 2 años), 95,78 euros.

En cuanto a la prima única, la que se paga de una vez para siempre, la cuota sería de 4.662 euros en San Sebastián, 600 euros más que en Bilbao y Pamplona y 500 más que en Vitoria. ¿Cuál es la razón de esta diferencia en las primas? Se debe a los diferentes precios de los servicios que se cubren, que son más elevados en los territorios más caros.

¿Y cuáles son las coberturas que ofrecen estos seguros? Destacan los servicios funerarios, que cubren los gastos de sepelio, tanto de inhumación como de cremación si así lo desean los familiares del difunto. «En el seguro se pacta una determinada cantidad de dinero. Es el coste medio de un entierro en la localidad donde vive el asegurado y sus alrededores, calculado por la compañía de seguros», explican.

Además, se cubre el traslado del cuerpo. Las coberturas incluyen también la gestión de servicios jurídicos, la asistencia para la vida diaria, el apoyo psicológico y la eliminación de la huella digital.