La huelga del Metal de Bizkaia se radicaliza y piquetes destrozan las oficinas de una empresa de 268 empleados

El incidente más grave tuvo lugar en Abadiño donde un numeroso grupo de personas -una parte importante encapuchados- asaltaron la sede de la empresa CIE Inyectametal, integrada en el grupo CIE Automotive, provocando importantes daños materiales en sus instalaciones. Tras el ataque la Ertzaintza identificó a 20 personas.

La patronal sectorial, la Federación Vizcaína de Empresas del Metal (FVEM), reiteró que «la huelga es un derecho que no debe ser impuesto por la fuerza» y sobre todo que «bajo ninguna circunstancia se pueden justificar atentados contra las instalaciones de las empresas y coacciones a trabajadores y trabajadoras, con el único objetivo de evitar que desarrollen su actividad con normalidad».

Además de los incidentes de Abadiño, al inicio de la jornada la Ertzaintza tuvo que acudir a varios lugares ante la presencia de piquetes, contenedores volcados y quemados e intentos de cortar carreteras de acceso a zonas industriales, como en el Parque Tecnológico de Bizkaia en Derio y Zamudio. Todo esto llevó a la Ertzaintza a identificar a otras 14 personas, cinco fueron en Zalbibar, otras cinco en Berriz (a los que se les ha abierto diligencias por portar petardos y otro material), dos en Igorre y otras dos en Zamudio.

Lo sindicatos convocantes del paro -ELA, LAB, UGT y CC OO- insisten en que el seguimiento de la huelga fue masivo, en niveles del 85%, mientras que la patronal FVEM lo reduce al 20%, inferior incluso al seguimiento registrado el lunes, recalcando que estuvo «muy condicionada por la presencia de piquetes».

La empresa que resultó más perjudicada durante los incidentes de ayer martes fue la planta de CIE Inyectametal en Abadiño, dedicada a la inyección de aluminio para el sector de automoción, que tiene una plantilla media de 268 personas.

Poco antes de las diez de la mañana, según testigos, un piquete violento, muy numeroso y con encapuchados, accedió a las instalaciones de la empresa rompiendo con palos todo lo que encontraban a su paso, afectando a sus oficinas y a sus talleres. Durante el ataque se produjeron momentos de tensión con los trabajadores de la compañía que en esos momentos estaban en sus dependencias. La Ertzaintza acudió a la empresa constatando que se habían producido «numerosos daños», procedieron a la idenfiticación de 20 personas y abrieron una investigación al respecto.

Un trabajador de CIE Inyectametal manifestó a este periódico que «los daños han sido muy cuantiosos». «Nos va a costar una millonada... mucho tiempo y mucho dinero sacar adelante la empresa» lamentó. Desde la dirección de la compañía no quisieron hacer ningún comentario. Tras los hechos algunos trabajadores que están contratados a través de ETT indicaron que han recibido la comunicación de que no acudan a trabajar hasta nueva orden.

El ataque de ayer martes sobre esta factoría de Abadiño se produce después de que lunes otro grupo de piquetes tratase de impedir sin éxito que la empresa funcionase con normalidad. En esa ocasión no adquirieron un talante tan violento y se marcharon sin incidentes.

Este ataque llama más la atención porque hace menos de dos semanas que esta empresa firmó con el comité de empresa -compuesto por 4 miembros de LAB, 3 de ELA y 2 de CC OO- su convenio para el periodo 2019-2020, pacto refrendado después por la plantilla. En el nuevo convenio se recogen la mayoría de las reivindicaciones sindicales, muchas de las cuales se piden para el convenio sectorial. Así se incluye un alza salarial anual del IPC+1%, más una paga consolidable de 150 euros en 2019 y de otras pagas de 200 euros para los otros tres años. Además 14 contratos temporales pasarán a indefinidos, se reducen las contrataciones vía ETT y se asegura la ultractividad indefinida del convenio y la imposibilidad de su inaplicación.