Gipuzkoa pierde una media de 45 empresas de transporte de mercancías por carretera al año
El territorio ha perdido en la última década 448 firmas, agudizándose la crisis que atraviesa un sector con cada vezmás dificultades para rentabilizar la actividad
Dumping social de compañías del este de Europa, falta de relevo generacional y en las últimas semanas unas movilizaciones de agricultores en buena parte de ... Europa que han frenado el transporte internacional y preocupa a las empresas de un sector en crisis desde hace años.Estas son algunas de las razones que explican la paulatina desaparición de compañías de transporte de Gipuzkoa en la última década. Los números hablan por sí solos. El territorio ha perdido en la última década 448 firmas de transporte por mercancías por carretera, frente a las 388 de Bizkaia y las 67 de Álava, según el departamento de Medio Ambiente, Planificación Territorial y Vivienda del Gobierno Vasco.
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Aunque el informe elaborado por el departamento del consejero IñakiArriola recoge empresas de transporte de todo tipo como 'interurbano de pasajeros por ferrocarril', 'transporte por taxi', 'marítimo de mercancías' o 'servicios de mudanza', son las compañías de transporte de mercancías por carretera –es decir, camiones, furgonetas y camionetas– las que aglutinan el 79,5% del total con 1.747 firmas en 2023 en Gipuzkoa.
Son, precisamente, este tipo de empresas las que con más virulencia han desaparecido de las carreteras guipuzcoanas en los últimos diez años, al pasar de 2.195 compañías en 2014 a las ya mencionadas 1.747 del año pasado, lo que se traduce en una merma del 20,4%, o lo que es lo mismo, 448 menos. Desde la patronal guipuzcoana Guitrans – que aglutina a cerca de 2.000 camiones y 500 empresas– su presidente, Iñaki Cepeda, asegura incluso que «si nos retrotraemos a 2008, cuando comenzó la grave crisis económica que lastró la economía mundial, la reducción asciende a un 43%». Cepeda también pone el foco en el comportamiento del número de autorizaciones de transporte (una por cada vehículo) que ha bajado un 7% desde 2014.
1.747
empresas de transporte por carretera existen a día de hoy en Gipuzkoa, frente a las 2.195 de hace diez años.
Guitrans e Hiru (el sindicato de transportistas autónomos que reúne a cerca de 800 conductores) han alertado estas semanas que si persisten las movilizaciones y, por ende, el bloqueo de algunas carreteras europeas por las protestas del agro las empresas del territorio pueden sufrir problemas de suministro y el impacto en ellas puede ser «brutal».
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El informe también ofrece una clara fotografía del empleo en el sector, en el que trabajan 11.593 personas en Gipuzkoa, de las cuales más de la mitad (53%) lo hacen en empresas dedicadas al transporte de mercancías por carretera (6.176).Además, el documento ofrece la estadística de empleo segregada por sexo, donde solo 909 mujeres trabajan conduciendo un vehículo de transporte de mercancías por carretera en nuestro territorio (14,7%). Esta variable tiene un comportamiento totalmente opuesto a la evolución del número de empresas. Y es que este tipo de compañías han ganado 763 trabajadores en la última década.
Pero, ¿a qué se debe este vaivén entre el número de empresas y de empleados? La razón la encontramos en los conductores autónomos. «En un momento en que el sector sufre un gran déficit de conductores, unido a las dificultades de los últimos años para rentabilizar la actividad del transporte en un entorno global y hostil, muchos autónomos han optado por trabajar como asalariados ofreciendo a las empresas su experiencia en el sector», concluyen desde Guitrans.
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Falta de relevo generacional
Desde la patronal guipuzcoana también advierten de que en diez años se jubilará el 70% de los conductores y que presentan una edad media de 52 años. Cepeda asegura que «es imposible atraer a nuevos profesionales si las condiciones en que tienen que desarrollar su actividad son indignas, en lugares inhóspitos, sin servicios y expuestos a tramas criminales y sabotajes». Pero, a su juicio, «no basta con crear zonas de aparcamiento seguras y equipadas, porque esto hay que pagarlo y para ello el transporte debe ser una actividad lo suficientemente rentable para hacer frente a este coste, que debe ser repercutido en el precio del servicio. Parece sencillo pero no lo es. Es un cambio cultural ineludible».
En los últimos años los costes que tienen que afrontar estas empresas vascas se han elevado un 38%, según el Observatorio del Transporte de Euskadi. De los gastos totales, un 33% se dedica a pagar salarios y otro 33% a combustible. Fue en 2022 cuando el coste total por vehículo articulado de carga general superó los 150.000 euros.
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150.000
euros fue el coste en 2022 de tener un vehículo articulado de carga general en Euskadi.
Guitrans advierte de que «en Gipuzkoa el sentir general es que es muy difícil encontrar conductores profesionales. En toda España, según un estudio realizado por Transport Intelligence, harían falta 15.340 conductores más para que la cadena de distribución funcione con normalidad. Extrapolado a Gipuzkoa la cifra rondaría los 500.
Cepeda explica que «estamos ante un cambio social, con altas tasas de universitarios que ponen el foco en otro tipo de desarrollos profesionales. Es importante fomentar la formación profesional y mejorar la imagen de actividades que son esenciales para la economía y la vida como es el caso del transporte de mercancías. En los próximos años se van a jubilar muchos empresarios y conductores y la situación para el transporte de mercancías puede ser dramática».
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