Siemens Gamesa no descarta más cierres de fábricas tras el anuncio de clausura de Aoiz

Siemens Gamesa no descarta más cierres de plantas tras los anunciados en Dinamarca y en Aoiz (Navarra) dentro del plan de reestructuración de su negocio 'on-shore', es decir, eólico terrestre, que presentó ayer la compañía en Alemania.

El consejero delegado de la firma, Andreas Nauen, durante el desarrollo del Capital Markets Day, no precisó qué fábricas se está planeando cerrar ni si alguna de ellas se encuentra en España, pero reconoció que todas las áreas geográficas, todos los países y todas sus instalaciones están bajo una detallada evaluación. Así, enumeró, además de España, Alemania, China o EE UU, a una pregunta de este periódico sobre qué factorías de qué ubicaciones podrían cerrarse y si alguna clausura afectará a nuestro país.

Ello, porque uno de los principios que rigen la reconversión de su división 'on-shore' para hacerla sostenible y rentable pasa por primar la generación de beneficios y márgenes sobre el volumen.

Nauen reconoció que la decisión de cerrar Aoiz no fue fácil, pero añadió que no se pueden evitar este tipo de decisiones y que cuando haya más en ese sentido, se comunicarán.

Siemens Gamesa, que cuenta en España con una docena de plantas en las que trabajan 4.900 personas, también tiene en el foco toda la cadena de suministros, con objeto de optimizarla, por lo que su reestructuración podría extenderse más allá de sus fábricas; podría atacar con mayor amplitud al tejido productivo español, a través de sus proveedores.

Nauen explicó que si bien Siemens Gamesa seguirá trabajando con las empresas españolas que les venden productos, continuará vigilando su eficiencia.

Otro riesgo sobre la mesa para las plantas españolas es el posible traslado de producción a Portugal, sobre todo tras la compra de Senvion a principios de año. Su fábrica en la localidad lusa de Vagos está bien posicionada para trabajar con los equipos de 5 MW y tiene costes laborales un 30% inferiores a los de la planta de Aoiz. Respecto a esta cuestión, el alto ejecutivo de la compañía hispano-alemana explicó que ellos no hablan de «traslados» de producción, sino de «optimización» de su red manufacturera global, lo que invita a pensar que es una temida posibilidad que en absoluto se descarta.

Siemens Gamesa se ha visto muy afectada por la crisis del sector y por el golpe que ha supuesto el coronavirus para toda la actividad económica. Así pues, en los nueve primeros meses de su ejercicio fiscal presentó unas pérdidas récord de 805 millones de euros. Si bien con motivo de su rendición de cuentas a la comunidad inversora presentó previsiones para los próximos años, evitó hacerlas para el ejercicio fiscal en curso que está a punto de terminar. Así las cosas, para 2021 espera registrar márgenes de entre un 3% y un 5% -lo que supone una revisión a la baja desde la horquilla previa de entre el 4,5% y el 6%-, que saltarán hasta el 8-10% en 2023. Ello, tras marcar registros negativos en el último trimestre.

La compañía avanzó que sus ingresos el próximo año se encontrarán entre los 10.200 y los 11.200 millones. Y, además, se comprometió a pagar un dividendo equivalente al 25% de su beneficio en 2023.

La reestructuración de su negocio eólico terrestre no impedirá que en los próximos cinco años su crecimiento esté congelado y en el siguiente quinquenio apenas crezca un 3%. Es una división que irá perdiendo peso en el grupo a favor de la eólica marina, con un avance del 22% hasta 2025 y del 7% en los siguientes cinco años. Mientras, para el segmento de servicios la empresa augura crecimientos de un 8% en los dos periodos de cinco años.

Los títulos de la compañía bajaron un 4,56% en Bolsa, pero en el año aún suben un 45%.