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Martes, 21 de enero 2020, 17:25
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«Queremos ser un 'Made in Germany', pero en Lizartza». Iñaki Oreja asegura que en su empresa, Kimua Group, se trabaja con seriedad y «hay una gran preocupación por la seguridad de las personas en el ámbito laboral».
2011 año de fundación: La empresa de Lizartza tiene actualmente en plantilla a 40 trabajadores.
Actividad: Ingeniería: Diseño y fabricación de piezas para los sectores energético, ferroviario y ciencia. Manipulación de cargas y formación en seguridad.
-¿Con qué idea surgió Kimua Group?
-Nuestra actividad comenzó ofreciendo proyectos llave en mano de útiles de elevación, para clientes de los sectores energético, ferroviario así como científico. Nos encargamos de todo el proceso, desde el diseño de la pieza hasta la fabricación de la misma, con el valor añadido de que nos comprometemos a que se cumplan todas las certificaciones. Para realizar todo este proceso con garantías y comprobar que el resultado es el esperado contamos con el banco de pruebas de mayor capacidad del Estado, lo que nos permite hacer testeos con cargas de hasta 1.000 toneladas.
-No se han limitado a esta actividad y abordaron un segundo nicho.
-Llegado el momento, nos preguntamos ¿por qué no nos encargamos nosotros también de ofrecer los útiles necesarios para mover esas piezas grandes y pesadas? La respuesta dio lugar a ofrecer soluciones integrales de manipulación de carga: elevarla, desplazarla y posicionarla para el montaje en el lugar de destino. Esto a su vez nos ha permitido ofrecer un servicio de renting: en el caso de que el cliente precise de estos útiles de modo puntual, ofrecemos la posibilidad de que nos los pueda alquilar, por ejemplo para mover un tren de un lugar a otro.
-A su vez, ofrecen formación en seguridad. ¿A qué se debe este servicio?
-En el Estado en general hay poca concienciación en torno a la seguridad, y también en el País Vasco, no somos conscientes de que está en juego la vida de personas. No ocurre lo mismo en otros países: en Alemania, Dinamarca o centro de Europa existe una conciencia diferente. Entendemos que es importante sensibilizar sobre esta cuestión, porque se siguen produciendo muertes por usos mal gestionados, falta de recursos... pero principalmente por falta de conocimiento.
-¿Qué buscan con todos estos servicios?
-Queremos ser un 'Made in Germany', pero en Lizartza. Nadie discute el buen hacer de los alemanes... Nosotros también ofrecemos los mismos estándares de calidad, en definitiva ofrecemos a nuestros clientes seguridad, y les garantizamos su tranquilidad.
-Sus clientes son principalmente empresas extranjeras, ¿cómo consiguen ser cercanos?
-Queremos que nuestros clientes se sientan cerca de nosotros y la tecnología se ha convertido en un gran aliado para ello. Hacemos vídeoconferencias todos los días, y una vez al año somos nosotros los que visitamos a nuestros clientes para que haya contacto humano. Tenemos que transmitir la idea de que formamos parte de su equipo y, aunque no estemos muchas veces físicamente en el mismo lugar, la información fluye.
-Para ofrecer calidad, primero hay que contar con un grupo motivado.
-Tenemos una filosofía que denomino 'Kimuality'. Mi reto personal es conseguir que las personas vengan a trabajar ilusionadas y con una eterna sonrisa. No puedo competir con las empresas grandes a nivel de salarios, pero en todo lo demás Kimua tiene ventaja. Yo garantizo a todas las personas que empiezan a trabajar aquí que van a crecer tanto a nivel profesional como personal. Quiero que los empleados estén contentos.
-Pero, hay que ser rentables.
-Todo negocio se constituye para ser rentable. Es una condición 'sine qua non' que se tiene que dar. Pero no puede ser una obsesión, sino un objetivo. La rentabilidad no es mi mayor preocupación. Considero que si una persona es feliz, los procesos llevarán a que se completen los proyectos y los beneficios vendrán después.
-¿Por qué fundó Kimua Group?
-Soy tornero de profesión y comencé a trabajar en un taller de mecanizado. Pero vi que quería algo más. Estudié Ingeniería Superior y un Master MBA, todo ello mientras ejercía de profesor. A los 30 años, cuanto terminé esta formación, me pregunté: ¿Qué hago con todo lo que he aprendido? Para mí es importante el emprendizaje y aposté por fundar Kimua Group. No he inventado nada nuevo. Solo he puesto en práctica lo que me han enseñado en casa.
-¿A qué le da importancia a la hora de liderar a su equipo?
-Quiero que todo el mundo se sienta importante, y eso se consigue escuchando. Hay que dar la oportunidad a que cada uno pueda expresar sus problemas. Muchas veces, al llegar al trabajo, paso puesto por puesto para preguntarles cuáles son las dificultades del momento para que sientan que estoy con ellos.
-¿Qué reflexión hace como emprendedor?
-Si yo he emprendido, todo el mundo puede hacerlo. Me gustaría que hubiera más emprendedores. Considero que es necesario. Hay que animar a los jóvenes a ello, porque observo que viene gente muy capacitado para ello. El camino muchas veces no es sencillo, hay que sufrir. El objetivo tiene que ser llevar a cabo algo por voluntad propia y disfrutando de lo que se hace. Y rodearse de un buen equipo. Hoy es el día en el que he conseguido irme de vacaciones tranquilo, porque estoy rodeado de un gran equipo.
-¿En qué le gustaría que se convirtiera Kimua?
-Mi esperanza es que esta empresa se convierta en un centro de referencia dentro de nuestro sector. Y me gustaría que esta compañía crezca de la mano de personas que crean en un bien común. Quiero que los empleados trabajen por el bien del colectivo, no el individual.
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