El Real Unión paga caro sus errores

Aún así, fue esperanzador el arranque unionista. Hacia el cuarto de hora de juego, Escobar, otro ex del Lugo, desbordó a Johaneko desde la línea de fondo y mandó el balón al primer palo. Por allí apereció Solís, que metió la puntera sin dirigir el cuero a la portería. El Lugo dio cumplida respuesta a los dos minutos. Javi Vázquez, a pie cambiado, sacó un saque de esquina y en el rechace Víctor Narro disparó a puerta. Ojeda, el mejor situado dentro de la aglomeración de jugadores en el corazón del área, completó la acción con un lanzamiento alto.

El propio Ojeda probó poco después otro disparo desde fuera del área que pasó cerca de la base del palo. Y después, Irazusta neutralizó un lanzamiento de Nacho Quintana, el punto de inflexión para la pérdida del control visitante. Superada la media hora de juego, Irazusta tuvo que estirarse para desviar un disparo peligroso de Jozabed. Los problemas para el Real Unión continuaron antes del paso por los vestuarios. Irazusta estuvo espléndido con otra estirada para sacar un remate desde el borde del área pequeña de Antoñín, que había recibido un pase de Víctor Narro. Un desmarque interior de Jozabed permitió al propio Narro recibir escorado en el área y disparar fuera de los tres palos.

Ninguno de los entrenadores movió piezas al arrancar un segundo tiempo fatídico para los intereses del Real Unión. Un disparo alto de Alberto Solís desde la frontal del área dio alas a los foronterizos. La respuesta la puso Antoñín a la escuadra.

Los lucenses no perdonaron al cumplirse la hora de juego. Javi Vázquez centró a media altura desde la izquierda, el balón cambió de trayectoria al golpear en la defensa irunese y Ojeda conectó una espectacular volea desde dentro del área con la pierna derecha para batir a Irazusta.

Fran Justo dio entrada a Arzak por Oyarzun unos minutos después del mazazo. Sin embargo, no cambió el panorama. Los iruneses no acertaron a defender un lanzamiento largo del portero. Willy y Nacho Quintana armaron un contragolpe e Irazusta rechazó el lanzamiento del primero. Acto seguido, Ojeda mandó el cuero al lateral de la red. La sentencia se firmó poco después. César Morgado envió el balón a Willy, que cruzó picado.

El Real Unión pudo meterse en el partido a cinco minutos del final. Arzak mandó a las nubes un centro de Eimil al segundo palo y Córdoba también estuvo cerca de recortar diferencias en un libre directo ajustado al palo que Lucas desvió a córner.