La ilusión se contagia en el Gasca

Cuenta con la experiencia de haber disputado ya eliminatorias coperas con el equipo canario. «Cuando inicias la temporada, el objetivo es disputar todos los títulos que estén al alcance y la Copa ahora es uno de ellos. Tenemos ese privilegio y queremos llegar lo más alto posible».

Reconoce que el duelo frente a las levantinas «va a ser complicado. Tenemos que jugar nuestro mejor baloncesto si queremos ganarles e intentar que ellas no estén cómodas en la cancha». Y añade que «ellas tienen más presión que nosotras e intentaremos aprovecharlo. En principio vamos a disfrutar, pero luego a medida que transcurra la competición ya nos marcaremos otros objetivos. En un partido nunca se sabe lo que puede pasar y en la Copa menos todavía».

A la hora de desvelar las claves, Mbulito prefiere ser cauta. «Lo más importante, además de estar acertadas en ataque, es perder el menor número de balones e intentar que ellas cometan errores en defensa», puntualiza. El bloque no debe tener fisuras. «De las jugadoras que están hoy en el equipo, no hay muchas que han tenido la ocasión de disputar la Copa de la Reina y eso supone una motivación extra para ellas. Queremos hacer un gran papel».

Mbulito ya sabe lo que es jugar este tipo de partidos. «Sí, lo hice en el Gran Canaria, en la Super Copa, pero hace ya tiempo. Son partidos diferentes a los de la Liga, hay más competitividad y todos los equipos mantienen de inicio la ilusión por ganar y el listón de exigencia es más alto», dice.

Pero también es consciente de que «a un partido puede pasar cualquier cosa y hay que estar muy concentradas porque los errores se pagan muy caros».

En este tipo de competiciones, los equipos deben abstrarse del ambiente. «Las aficiones se desplazan y la fase final va a ser una fiesta, pero hay que intentar estar al margen y no hacer caso a todo lo que rodea a la fase final».

Aunque admite que «ganar el título entraña sus dificultades», no arroja la toalla de antemano. «Todo es posible, podemos dar la sorpresa. Tenemos los mimbres necesarios para hacerlo. Soy una privilegiada por volver a disputar una fase final de Copa y espero que nos salgan bien las cosas».

Mbulito, que debutó en la máxima categoría con sólo catorce años, es consciente de que «aunque sea una fiesta, debemos estar muy concentradas. Todo es posible, podemos dar la sorpresa. Soñar es gratis. La maleta la tengo hecha en casa para cuatro días».

Por su parte, la ala-pívot belga Becky Massey, que el jueves cumple 24 años, quiere celebrarlo por todo lo alto. También sabe lo que es jugar una fase final de la Copa de la Reina, en este caso con Estudiantes «pero sólo jugué cuatro minutos» recuerda. «La Copa es una competición especial y tenemos ganas de conquistar el trofeo». A su entender, este tipo de partidos se ganan «desde la defensa. A partir de ahí podremos tener opciones de pasar».

Massey desvela que «venimos de jugar partidos muy duros, pero la Copa es algo diferente. La clave estará en la defensa. Si defiendes bien, puedes correr luego y anotar. Hemos disputado cuatro partidos muy duros el último mes, pero veo al equipo muy animado. Claro que es posible ganarle al Valencia. En el Gasca no pudimos hacerlo, pero a un partido pueden pasar muchas cosas. Que ellas no estén agusto. Si lo conseguimos, tendremos opciones de pasar a semifinales».