La Casa del Faro se prepara para su transformación

Si ayer la atención se fijaba en el helicóptero, este viernes el foco informativo se encontraba en la visita de la escultora Cristina Iglesias al faro de la isla. Una forma simbólica de dar el pistoletazo de salida a las obras de remodelación del faro de las isla de Santa Clara que concluirán en octubre de 2020.

La artista Cristina Iglesias ha expresado su «emoción» al ver que «todo lo soñado» se hace realidad. La Casa del Faro mantendrá su aspecto exterior pero se transformará todo su interior en una gran escultura pública. Iglesias ha informado del estado del proyecto durante una visita -que puedes ver en el vídeo sobre estas líneas- en la que ha estado acompañada por representantes institucionales, entre ellos el alcalde, Eneko Goia, y miembros del equipo técnico y artístico encargado de su ejecución.

La escultora se ha mostrado «muy ilusionada» con el arranque el lunes de la primera fase de las obras, que incluye el vaciado de la Casa del Faro y la excavación del suelo donde se instalará el gran vaso de bronce diseñado por la artista y que se construye en la empresa eibarresa Alfa Arte. Se trata de una fuente que emulará el fondo de la bahía, jugará con su profundidad y reflejará los cambios de las mareas a través del movimiento del agua sobre el metal.

Iglesias ha insistido en que esta intervención artística, que pretende ser también una reflexión sobre la «protección» de los mares, «no perturbará en nada» la imagen de la isla. Es más, ha asegurado que su obra servirá para restaurar un edificio que está «en muy malas condiciones» y devolverlo a un estado «más original y auténtico». Por su parte, el alcalde donostiarra Eneko Goia ha recalcado que «la intervención se circunscribe al faro» y ha explicado que se ha realizado un estudio exhaustivo previo sobre el entorno y el paisaje. El alcalde ha asegurado que, tras las sucesivas fases del proyecto, la obra estará culminada para «septiembre u octubre de 2020».

El arranque de los trabajos de esta primera fase, adjudicados a la empresa Moyua, por más de 550.000 euros, será posible después de que este jueves un helicóptero trasladara a la isla todas las piezas de la grúa de 38 toneladas en 33 vuelos.