Xabier Anduaga: «Todavía estoy temblando por las sensaciones del concierto de ayer»

Esta actuación será la segunda que ofrezca en esta edición de la Quincena, tras participar el lunes junto a la soprano Federica Lombardi, la mezzosoprano Paula Murrihy y el joven bajo William Thomas, la Orquestra de la Comunitat Valenciana, con el maestro Mark Elder al frente, en el concierto patrocinado por DV. La comparecencia del tenor ante los medios despertó una notable expectación ya que sus dos conciertos en esta Quincena Musical están considerados platos fuertes de la 86ª edición.

«Es un gusto cantar con una orquesta que escucha y con el maestro», aseguró Anduaga respecto al concierto del Kursaal, en el que «al darme la vuelta, veía sonriendo a mis amigos del Orfeón. Fue muy emotivo», aseguró el tenor donostiarra, que empezó su carrera en la fislas de cantores de la agrupación vocal donostiarra.

Respecto al concierto del próximo martes, para el que ya no quedan entradas, Anduaga indicó que el programa «está muy basado en mi carrera, en lo que es y en lo que será». Por eso iniciará el recital con arias y canciones de Tosti, Bellini, Donizetti y Verdi. «Empecé mi carrera con canciones italianas» en la Academia Rossiniana de Pesaro, recordó. El pianista, a quien Anduaga se niega a considerar «acompañante» ya que «me lo tomo como un concierto de cámara en el que ninguno de los dos puede estar por encima del otro porque dejaría de serlo», interpretará la paráfrasis que Liszt realizó sobre piezas del 'Rigoletto' de Verdi.

La segunda parte del recital se internará en el lied alemán y en la canción francesa para finalizar con dos fragmentos zarzuelísticos: 'Flor roja' de 'Los gavilanes' de Jacinto Guerrero y 'La apasionada' de 'La tabernera del puerto', del donostiarra Pablo Sorozábal.

El tenor donostiarra se felicitó de las condiciones que ofrece el Teatro Victoria Eugenia en lo que respecta a este recital, en el que, según dijo, «me hace falta tener cerca al público y que resulta perfecto para un concierto de piano y voz. El Kursaal es menos íntimo», reconoció, respecto al formato y las características de la actuación del martes.

Patrick Alfaya explicó que a lo largo de sus treinta años como programador ha visto «a muchos tenores con grandes condiciones, pero que se echaron a perder por falta de disciplina», una cualidad, junto con el trabajo perseverante, que han permitido a Anduaga convertirse «en uno de los tenores más importantes del mundo en estos momentos». Alfaya lo comparó con un deportista de elite y resaltó también el papel de la mujer del tenor, Elena Barbé, en este crecimiento. Por otra parte, tuvo palabras de elegio para la complicidad que después de tantos años hay entre Anduaga y Maciej Pikulski. «Sin un buen pianista, un buen cantante está perdido. Necesitas a alguien que respire contigo, casi que cante contigo y no es fácil de encontrar», dijo el responsable de Quincena sobre el pianista polaco, que a su vez calificó a Anduaga como «el talento más extraordinario que he visto».