Iagoba Fanlo: «Disfruto mucho en mi ciudad natal. Me siento querido y apreciado»
El donostiarra ofrece junto al pianista Mario Prisuelos un concierto en San Telmo con obras de Guridi, Franco, Martinu y Shostakovich
El Ciclo de Música de Cámara propone esta tarde un recital de violonchelo y piano con obras compuestas en el siglo XX inspiradas en la naturaleza.
– 'Popular y magistral'. ¿Por qué ha escogido este título para su concierto de hoy?
– La música es el producto de la suma del conocimiento, de la concentración, de la inspiración y de la imaginación, en partes complejas de diseccionar. Los sonidos presentes en la naturaleza han reforzado el imaginario de los compositores, y así, la música ha avanzado entre ambos mundos a lo largo de siglos, moviéndose entre sonidos tradicionales y naturales, y otros más intelectualizados.
– El concierto de hoy junto al pianista Mario Prisuelos está inspirado en los sonidos presentes en la naturaleza. ¿Cómo se materializa en las obras que van a interpretar?
– Presentamos un programa que aúna una generación de compositores formados al más alto nivel intelectual, pero que tienen una fuerte raíz inspiradora en sus tradiciones autóctonas.
– ¿Diría que eso es lo que tienen en común Guridi, Franco, Martinu y Shostakovich?
–Todos ellos conforman una élite de compositores de inicios del siglo XX que son capaces de unir todas las virtudes que he enumerado antes: conocimiento, concentración, inspiración e imaginación. Los cuatro se forman amparados en los movimientos iniciados por Bartok, De Falla o Pedrell. Buscan en la música popular un retorno a los sonidos y una conexión con el sentir más original de la música.
«No tenemos constancia de que su obra haya sido interpretada con anterioridad»
– Desde el punto de vista del violonchelo, ¿qué destacaría de sus obras ?
–José María Franco realizó giras tocando el piano junto a Gaspar Cassadó, mientras que Shostakovich lo hizo junto a Rostropovich. Ambos violonchelistas son dos de los más grandes exponentes de la interpretación musical en el siglo XX.
– ¿Y cara al público? ¿Qué les diría sobre su concierto?
– No tenemos constancia de que el 'Adagio' de Guridi haya sido interpretado en público con anterioridad. Supone un descubrimiento musical muy sorprendente. Es una obra de juventud, una tarjeta de visita de lo que un compositor tan grande anticipaba.
«Los sonidos dela naturaleza han reforzado el imaginario de los compositores»
– Usted es donostiarra. ¿Qué supone actuar en la Quincena Musical?
– Actuar en la Quincena es sentirse en casa. Disfruto siempre en mi ciudad natal y me siento muy querido y apreciado.
–Actúa en el claustro del Museo San Telmo. ¿Cómo se siente en un escenario semiabierto? ¿Lo ve adecuado para su propuesta musical?
–El escenario, junto al público, al compositor y al intérprete, van de la mano. Todos contribuimos en nuestra medida a que el ambiente y la experiencia sean completos.
– Después de este concierto, ¿qué proyectos tiene?
– Actuaré junto a Miguel Ituarte, e Itziar Oyarzabal en el Ateneo de Madrid, donde ofreceremos música de los iparraldetarras Journeau y Ravel. También tengo tres estrenos de Martínez Campos, Pagán y Grundman en el Festival de Música Contemporánea de Madrid y ofreceré la 'Suite de Jazz 'de Bolling en la Sala Mozart de Zaragoza. Esta obra es una gran desconocida, pero una joya del soft-jazz. Después tengo recitales en Londres, Bogotá, Lima, Berlín... tengo la agenda ocupada para la temporada que viene.
