De la salsa al punk: el Glad is the Day «más ecléctico» vuelve el domingo con 16 conciertos

«Quizá esta sea su edición más ecléctica», opina Álex López, socio fundador de la sala Dabadaba y uno de los responsables de programación de Glad is the Day. «Hay salsa, rock n' roll, pop, afrobeat... el punk-grunge noventero de Lukiek», liderado por el guitarrista de Belako Josu Ximun; o el «hip hop soulero de Queralt Lahoz, venidos desde la periferia de Barcelona para ofrecer su fusión de dancehall y rap con la copla». Pero, además, habrá otras actividades paralelas como «juegos infantiles y un mercado con cuarenta puestos de artesanía de la comarca», añade Jon Aizpurua, director de Acción Cultural de Donostia Kultura.

El festival, sin embargo, presentará un «aperitivo» musical en la víspera. Mañana a las 13 horas, la plaza interior de Tabakalera acogerá la actuación de No soy París, nombre artístico que David Grajal utiliza para su nuevo proyecto personal de pop-rock. Nacido de las propuestas vinculadas al servicio Musikagela, el músico donostiarra lleva desde los 16 años formando parte de bandas de la escena local como Susmara que, tras la salida de uno de sus miembros hace unos meses, ha continuado con la misma formación.

«Se mantiene el formato, ya que tenemos que adaptarnos a las características del parque, con los grupos de corte más orgánico en el Stage Nagusia y las propuestas urbanas en el escenario Ruina Sónica». El primero de ellos se localizará a la entrada por la plaza de las Cigarreras tras el parque infantil, mientras que el segundo se ha movido detrás de las ruinas junto al muro de la calle Mundaiz.

Entre los 16 grupos y solistas que llenarán la jornada dominical en esta sexta edición de Glad is the Day «hay un gran equilibrio». Desde grupos locales como Lukiek, Teko Maisin y Lurrin, a bandas que «vienen de todo el Estado y de otras partes del mundo. Muchos incluso han recorrido Europa», explica Aizpurua.

Del escenario principal, destaca la actuación de la orquesta colombiano-navarra Goxuan Salsa, «una banda muy graciosa de música latina que canta en 'euskañol'» y, en contraposición, los ritmos tradicionales africanos de 33 Ewe, fundado en un barrio de Lomé por dos multinstrumentistas que «cantan en el idioma nativo de Togo».

También sonará el pop yeyé de los 60 que han recuperado las andaluzas Adiós Amores o el «perreo» de LaMia Mami, «criada en la cantera del Dabadaba». Ahora bien, para Aizpurua, el 'highlight' de la tarde correrá a cargo del show de Lie Detectors (19.40 horas). El grupo formado entre Errenteria y Donostia cerrará la tarde con su hard rock «que sin duda dará mucho que hablar».

En la programación del escenario Ruina Sónica, Álex López considera que «se ha conseguido recoger el sentir que vemos en el 'Daba' de hacia dónde se dirige la música electrónica y de vanguardia». Las ocho citas que presenta el escenario 'pequeño', abren con «propuestas personales y muy frescas». El pamplonés Hofe x 4:40 ofrece «un enfoque de pop 'nuevaolero' y post punk que está 'pegando' mucho en España», mientras que Ben Yart, pseudónimo de una de las voces del colectivo Chill Mafia, «es un pequeño genio que bebe del flamenco, el rap y el pop».

López considera que el trap está evolucionando hacia propuestas más personales, muy de los 90 y que, en definitiva, «se ha roto la fórmula». El término 'trap' «ya no define todo lo amplio que es el género» y eso se escuchará con el drum&bass de Ttrraaccaa; el estilo latino de Umami y Topanga Kiddo; y el cierre con dos DJ de la «diáspora africana» como Mbodj & Baba Sy.

Una de las novedades de Glad is the Day es que será la primera vez que se celebre el último domingo de agosto, lo que ha obligado a adelantar horarios «ya que anochece antes». Los organizadores destacan que este es un «festival de día y no de noche, que termina a las 20.30 horas y que está pensado para familias y para que los jóvenes también tengan su espacio. Da cobertura a toda la ciudadanía». Habrá barra de bar patrocinada por Keler, aunque no dispondrán de puestos de comida, eso sí, Aizpurua anima a «que la gente lleve la tortilla desde casa o a comprar su bocadillo en los bares de Egia. Queremos que la hostelería del barrio se beneficie del festival».

La previsión meteorológica parece que dará una tregua el domingo y el programa se podrá celebrar bajo el sol, sin embargo, Aizpurua reconoce que, «en caso de lluvia, algunas actividades del escenario principal se trasladarían al Dabadaba y otras se reprogramarían en otras fechas».