«Echo en falta que el público arriesgue más a la hora de elegir un espectáculo de DFeria»
Norka Chiapusso Responsable de teatro de DK ·
La feria donostiarra, que comienza el próximo lunes, recupera la normalidad tras dos complicados añosLa vigésimo octava edición de DFeria comienza el lunes con 26 compañías –12 autóctonas, 9 nacionales y 5 internacionales–,s que representarán otras tantos espectáculos – ... 14 de ellos estrenos– en 40 funciones. Su director y responsable de teatro de Donostia Kultura, Norka Chiapusso, considera que la normalidad, tras dos años de pandemia, ha vuelto.
– Después de dos años en los que DFeria se ha visto afectada por la crisis sanitaria, ¿se puede hablar de una edición normal?
– En estos momentos sí, por lo menos bastante normal. Pero hace seis meses, cuando comenzábamos a organizar la feria estaba todo en el aire. El año pasado, además de las medidas covid, nosotros aplicamos otras porque los acreditados, en su mayoría programadores, no dejan de ser muchos y van en grupo.
– ¿Y respecto a las compañías que vienen?
– Nos hemos atrevido a traer algunas extranjeras. El año pasado desaparecieron. En concreto tenemos dos argentinas, una colombiana y una suiza. Por ejemplo 'Fuck Me', de Marina Otero, iba a venir el año pasado, pero resultó imposible porque es mucha gente en gira. Este espectáculo de danza nos gustó mucho cuando lo vimos y decidimos que esperaríamos a este año.
«Para nosotros era un paso estratégico clave que el público donostiarra viviera más la feria. Antes pasaba desapercibida»
– ¿Cómo define a DFeria?
– Después de un devenir histórico complicado, que llevó casi a su desaparición, en los últimos siete años se ha ido asentando. Hay más comunión con la gente que viene y, sobre todo, la hemos abierto a la ciudad. Para nosotros era un paso estratégico clave que el donostiarra la viviese más. Antes pasaba más desapercibida.
– ¿Cómo ha sido ese proceso?
– Con los profesionales que vienen se pueden llenar todos los escenarios, pero queríamos implicar al público donostiarra. Para ello hemos apostado por precios más asequibles que en la programación normal. También guardamos buenas butacas porque a la gente le gusta ver los espectáculos en las mejores condiciones. Antes, para al público general se destinaban las del anfiteatro y las plateas y el resto estaba ocupado porque dábamos más prioridad al tema profesional. Todo eso se está notando.
– ¿Cómo responde el público?
– Echo en falta un poco más de curiosidad, que es lo que hace falta en esta feria, que se atreva a ver cosas diferentes y arriesgue más. Se bebe del éxito, pero no se acude a otros planteamientos. Deben fiarse de nosotros porque cuando traemos una cosa es que está contrastada y va a sorprender en positivo.
«En esta edición vienen 485 profesionales, un número similar al de antes de la pandemia, y ya hemos vendido 1.500 entradas»
– ¿Y en cifras cómo se nota la apertura a más público no profesional?
– Profesionales vienen 485, un número similar al de antes de la pandemia. El mejor año vinieron 525. Este año hemos vendido unas 1.500 entradas. Si hace unos años vendíamos 8.000 euros en entradas, ahora alcanzaremos los 25.000, teniendo en cuenta que son bastante baratas. Durante los días de la feria, en el Victoria Eugenia, el escenario más caro, rondan entre los 12 y 24 euros, pero si se compraban al principio el coste era de 8 a 12 euros.
Noticia Relacionada
Programación completa de dFeria
– ¿Está satisfecho con cómo ha quedado la feria?
– Sí. Va a haber cosas muy interesantes, con propuestas muy vanguardistas. Estoy pensando en 'Espejismos, el lado épico' de Kolectivo Monstrenko. Otro atractivo es el de la compañía In Extremis y su 'El rey tuerto'; 'Fuck Me' va a ser lo más; la propuesta 'Christiane' de Belén Pasqualini va a sorprender por el personaje... Hay un montón de cosas muy chulas.
– ¿Está pensada principalmente para las compañías de casa?
– Todas las comunidades autónomas tienen al menos una feria y tienen como prioridad apoyar a su teatro, y nosotros también. Cuando la feria peligraba, llegamos a unos acuerdos con el sector que cumplimos escrupulosamente porque nos apoyaron mucho. Fijamos que el 45% de la programación sea vasca. También se concretó que el 45% sea teatro y otro 45% danza; el resto para otras ofertas más híbridas. Este año tenemos 26 espectáculos: 7 van a ser de teatro vasco, 7 de danza de compañías vascas, y el resto de teatro y danza de formaciones foráneas, más o menos la mitad nacionales y la otra mitad extranjeras, dependiendo del año.
«No buscamos lo comercial. Queremos una visión contemporánea, con espectáculos de mucha calidad»
– Se echan en falta actores de renombre.
– Esa no es la función de una feria. A veces viene alguno que está en una propuesta más especial. Los grandes nombres se venden por otro lado y vienen en otro momento. No estamos buscando traer a los cinco actores y a las cinco actrices más 'top' o con más repercusión, que tampoco son muchos más los que realmente tienen un tirón de arrasar. Hay intérpretes que están en segunda línea, a nivel popular, que no de calidad porque son unos actorazos que hacen cosas súper interesantes. No buscamos lo comercial. DFeria busca una visión contemporánea, aunque sea teatro clásico; espectáculos de mucha calidad, con contenidos delicados y que les cuesta entrar en los circuitos comerciales, que necesitan más apoyo para tener luego giras importantes. También apostamos por la novedad.
– Habla de novedad, pero tampoco hay tantos estrenos...
– Bueno, pero los espectáculos son recientes. El teatro, salvo que sean fenómenos, necesita un tiempo desde que se estrena hasta que dan el salto fuera de su comunidad.
– Para este año han elegido como palabra clave 'equilibrio'.
– Siempre elegimos un leivmotiv para jugar con él. Optamos por equilibrio porque venimos de una época un tanto caótica, no hay más que mirar cómo está el mundo. El espectáculo 'Dendu' de Oreka TX puede ser un símbolo de esta feria porque salimos a la calle, la gente va a vivir un regalo escénico espectacular en la pared del Kursaal. Hay equilibrio en la propuesta porque juegan con la txalaparta, el baile... es un mestizaje. Puede ser el espectáculo del que la gente se acuerde cuando hable de la feria de 2022.
«Optamos por ese lema porque venimos de una época un tanto caótica. No hay más que mirar cómo está el mundo»
– Aunque las fechas oficiales son del próximo lunes al jueves, han programado dos actuaciones de Aukeran para este fin de semana y una más de Els Joglars una vez que se ha clausurado.
– Lo hemos hecho pensando en el donostiarra, pero también en el público de la comarca que entre semana tiene más complicado venir a la capital. Els Joglars no necesita participar en una feria, pero queríamos homenajearles porque cumplen 60 años como compañía, '¡Que salga Aristófanes!' es su cuadragésimo espectáculo y son diez años de Ramón Fontseré como director.
«Es mejor para el espectador que una obra venga rodada»
- Estos días se está debatiendo si hay que suspender los espectáculos rusos. ¿Usted que postura tomaría si en la programación hubiera una compañía rusa?
- Lo tengo clarísimo. No hay que confundir a los dirigentes con los ciudadanos y mucho menos con los artistas. Si son gente que merece la pena y tiene un espectáculo bueno, qué culpa tienen ellos de tener un dirigente como Putin. Lo que está haciendo es súper condenable.
- Siempre que no se posicionen a su favor....
- Los escenarios son espacios de libertad. En todas las partes del mundo hay cuestiones de las que avergonzarse, ahí están Palestina, Sahara, Yemen...
- Da la sensación de que Donostia se está quedando un poco rezagada teatralmente. Por ejemplo, una compañía de aquí como es Tanttaka, ha estrenado su última obra 'Mi hijo solo camina un poco más despacio' en el Arriaga de Bilbao.
- Tanttaka estrena aquí cuando quiere. Si estrenaron en Bilbao es porque así lo decidieron ellos.
- Pero se echa en falta que lleguen antes obras que están ahora de plena actualidad, por ejemplo 'Silencio' con Blanca Portillo que ya ha pasado por Bilbao.
- 'Silencio' viene en el siguiente trimestre. Un estreno es un momento muy importante, pero también quizás el más débil de los espectáculos porque están todavía sin empastar, cuesta unos meses arrancar. Si el espectáculo viene rodado, viene mejor y eso es beneficioso para el espectador.
- Pero el público también quiere novedades.
- Si no lo ha visto va a ser novedad en el momento en que venga. Además, el Teatro Arriaga está mas centrado en artes escénicas y el Victoria Eugenia tiene una programación más compleja porque alberga también varios festivales de cine y conciertos.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.