Donostia abre el lunes sus bibliotecas y casas de cultura con estrictas medidas sanitarias

Donostia se suma a «la gran reapertura cultural». Las bibliotecas central e infantil y las de las casas de cultura volverán a funcionar a partir del lunes, 1 de junio, «con todas las medidas sanitarias pero garantizando una buena experiencia cultural», según anunció ayer Jon Insausti, concejal de Cultura de San Sebastián. El museo de San Telmo, por su lado, abrirá desde el martes, tal como adelantó este periódico, y a partir de ahora la entrada será gratuita, además de ese día de la semana, los domingos por la tarde.

El centro de Okendo aún no abre las puertas, sometido a obras de climatización que podrían alargarse hasta agosto, y el de Martutene recuperará su funcionamiento una semana más tarde que el resto.

Los organismos dependientes del Ayuntamiento donostiarra se unen así al 1 de junio como «día de la reapertura cultural» pactada en su día por el Gobierno Vasco, las diputaciones y los principales ayuntamientos. Museos como el Guggenheim o el Bellas Artes de Bilbao abren el lunes, y centros de Gipuzkoa como el Topic o el Balenciaga lo harán el martes. El Aquarium, el más visitado de Gipuzkoa, vuelve a recibir al público a partir del miércoles. Más tardarán teatros y cines, sujetos a un avance de la desescalada que permita mayores aforos que los establecidos ahora.

El concejal Jon Insausti puso en valor el regreso de la «cultura de base» de las bibliotecas. Durante el confinamiento han quedado en manos de los usuarios nada menos que 26.000 libros y elementos, que a partir del lunes irán retornando a los fondos. Los usuarios podrán acceder a los once centros culturales con mascarilla y manteniendo las distancias y demás medidas de seguridad, pero no será posible moverse entre baldas y estanterías, al menos durante la primera semana. El ciudadano podrá reservar su ejemplar telemáticamente, o pedirlo en el mostrador, y será el técnico quien se lo facilite. Una gran ilustración de Antton Olariaga recibirá a los usuarios en la entrada de los centros «como una manera divertida de abrir una nueva etapa». Las actividades como las tertulias de la Biblioteca Central se continuarán haciendo online durante el mes de junio.

Donostia Kultura resume así las nuevas normas: «El aforo será limitado, el personal de las bibliotecas y las personas usuarias estarán debidamente protegidos, en la entrada de la biblioteca habrá gel hidroalcohólico, en los mostradores habrá mamparas de protección, las personas usuarias deberán ponerse mascarilla para entrar y en todos los centros habrá una señalética especial para que el público conozca las condiciones especiales de acceso».

Los servicios que entrarán en funcionamiento son información y atención, consulta del catálogo de acceso público en línea, devolución de los libros y materiales cogidos en préstamo y servicio de préstamo de materiales con solicitud previa ya sea presencial o por vía telemática. En cuanto a las bibliotecas infantiles, los niños y niñas tendrán que ir acompañados de una persona adulta para coger materiales en préstamo o hacer devoluciones.

San Telmo, por su lado, arranca el martes, con aforo limitado y la oferta expositiva que presentaba antes del confinamiento. Ese día el escultor Koldobika Jauregi realizará en el claustro una instalación, desde las 11 hasta las 12 de la mañana y a la vista del público, como símbolo festivo de la reapertura. Como todos los martes ese día el acceso es libre, «y también lo será los domingos por la tarde para facilitar el acceso de los ciudadanos a la cultura», según Insausti.

Se mantienen los horarios de apertura habituales, de 10:00 a 20:00 ininterrumpidamente. El museo ofrece a sus socios la posibilidad de acceder a las exposiciones temporales en un horario exclusivo, de 9:00 a 10:00 horas, concertando cita.

Se controlará el acceso limitando el aforo del museo a menos de un tercio del total, «lo que permitirá que haya de media un espacio de 16 metros cuadrados por persona». Las exposiciones que se podrán visitar, además de la permanente, serán las abiertas en el momento del cierre: Poética retrospectiva. Fondo Fotográfico Antton Elizegi; El diablo, tal vez; y Mil manos sin rostro.

El museo de historia de la ciudad de Urgull, la biblioteca estival y el Natur Txoko no abrirán este verano «por las dificultades de adaptar esos espacios a las normas de seguridad, pero propondremos rutas y actividades para disfrutar del monte», dijo el concejal. Insausti reafirmó el propósito de celebrar los tres grandes festivales (Jazzaldia, Quincena Musical y Festival de Cine) «con las limitaciones derivadas de las medidas sanitarias pero programaciones interesantes».