La compañía Pez Limbo ofrece en Gazteszena 'Marea baja', una comedia para reír y llorar

Los dos personajes viven «perplejos por lo que les rodea, mostrando la debilidad de su existencia con desparpajo. Han encontrado su equilibrio en el no propósito, en simplemente existir».

La obra tiene un humor «muy de absurdo», cuenta Barandiaran. «Nos encanta también el chiste tonto, es una comedia que está bastante teñida de algo negro que impregna un poco todo».

Llegan a decir que los personajes no ponen fin a su vida por educación. «Este tipo de cosas resumen la función, porque nos vamos a reír, pero en el fondo podríamos también echarnos a llorar». No falta en 'Marea baja' una carga irónica para los profesionales del teatro. «En mi trabajo eso desde luego es una constante. La autoironía es habitual porque para hacer algo te lo tienes que creer, pero al mismo tiempo, no sé cómo, en alguna otra parte de tu cerebro tienes que no creértelo. Siempre tienes que ponerte en cuestión. Vale, lo que contamos va en serio, pero puede que también sea patético».

Por eso y otras cuestiones recomienda Barandiarán a los espectadores que vayan a verlos con la mente muy abierta. «En este tipo de trabajos sobre todo hace falta que no vengas con expectativas porque si lo haces pensando que te vas a partir de risa, igual no te hace tanta gracia. Si esperas ver algo muy intelectual puede parecerte que se queda corto. Y si crees que vas a ver un vodevil o un cabaret, igual te preguntas de qué vamos. Es mejor prepararse para que ocurra lo que tenga que ocurrir».