¡Gora San Marcial!

El ambiente festivo ha protagonizado este jueves la celebración de San Marcial en Irun donde los alardes tradicional y público han desfilado por la mañana con total normalidad, sin incidentes, y han vestido de rojo, blanco y negro la ciudad fronteriza en su día grande.

Como cada 30 de junio, Irun recuerda la victoria de sus milicias sobre las tropas francesas en la batalla de San Marcial de 1522, cuando, según cuenta la tradición, mujeres, ancianos y niños lograron distraer la atención de sus enemigos con antorchas, haciéndoles creer que eran atacados por un flanco, cuando realmente sufrirían el asalto por su retaguardia.

Bajo un cielo despejado y con temperaturas agradables, el desfile tradicional, en el que las mujeres solo participan como cantineras, ha arrancado sobre las 7.40 horas en la plaza Urdanibia, desde donde las 19 compañías se han dirigido a la plaza San Juan.

En este punto ha entrado al galope de su caballo el general del alarde, Paco Castillo, que se estrena en el cargo, para pasar revista a la tropa y realizar las descargas de escopeta que han dejado la plaza sumergida en una nube de humo de pólvora.

Respaldado por la mayoría de los iruneses, este alarde ha contado con la participación de 7.857 hombres que han desfilado al son de pífanos y redobles entre los aplausos de la gente que ha abarrotado las aceras.

El Alarde público, que reivindica la presencia de mujeres como soldado en las compañías, ha iniciado su recorrido a las 10.20 horas con un batallón formado por 1.200 personas que han marchado por las mismas calles por la que horas antes lo ha hecho el tradicional.

El Ararteko, Manuel Lezertua, y la directora de Emakunde, Izaskun Landaida, han acudido a la ciudad fronteriza para mostrar su apoyo a este desfile y reivindicar la participación de las mujeres no solo como cantineras.

También ha estado en los bajos del Ayuntamiento para recibir a la comitiva de este alarde el diputado de Cultura, Denis Itxaso (PSE), que asumió durante su campaña para las elecciones forales de 2015 el compromiso de acudir a ambos desfiles.

Itxaso ha destacado que la "tensión y la confrontación se han reducido notablemente" pero ha remarcado que las "soluciones tendrán que venir de quienes mejor conocen y más cariño sienten por el alarde: los iruneses", ya que solo un "cauce común aceptado como propio" permitirá avanzar en el respeto y la participación.

Por parte de EH Bildu, una formación que siempre ha respaldado el alarde mixto, han estado Xabier Olano y Ainhoa Elola, entre otros.

Este día se cumplen 20 años del inicio de la polémica en torno a los alardes ya que fue en 1996 cuando un grupo de mujeres irrumpió en el desfile tradicional de Irun para reclamar la participación femenina.

Esta circunstancia fue recordada por Manuel Lezertua quien solicitó ayer a "todos los poderes públicos" y en especial a las autoridades locales, su obligación de "remover los obstáculos y adoptar medidas" para lograr la igualdad efectiva de mujeres y hombres en este alarde que, a su juicio, sigue "sin ser debidamente encauzada".

La coordinadora general de Ezker Anitza, Isabel Salud, ha estado también en Irun y ha pedido al Ayuntamiento "que cumpla la Ley vasca de Igualdad" y "reciba al alarde mixto".

Desfile

La fiesta ha arrancado a las 4.00 horas, con el sonido de la Alborada. Y ya a las 6.00 horas las bandas de música de los alardes tradicional y mixto han interpretado la Diana.

A las 7.40 horas, con puntualidad exquisita, el cornetín de órdenes, Jon Agudo, que se estrenaba el año pasado en el cargo, tocaba las notas de la Arrancada y al ritmo marcado por la Banda del Alarde los hacheros han iniciado el ascenso a través de la calle San Marcial hacia la plaza San Juan.

Muchísima gente en las aceras y un día bañado por el sol acompañan este inicio del Alarde tradicional, que cuenta con la participación de unos 8.000 hombres. Eso sí, en ningún caso el de este año hará el calor de la edición anterior.

Una vez trasladadas las 19 compañías a la plaza de San Juan, en torno a las 8.15 de la mañana, hacía su entrada en la plaza el general del Alarde tradicional, Paco Carrillo. Lo hacía a galope de un hermoso caballo blanco. Como manda la tradición, ha saludado a las 19 diferentes compañías. «¡Gora Irun! ¡Gora San Marcial!» ha entonado como grito de guerra.

Minutos después ha tenido lugar la llamada a capitanes y jefes de unidad. «Vamos a hacer el Alarde que el pueblo de Irun merece. Con seriedad y alegría», ha sido el mensaje que les ha trasladado Carrillo.

Poco después se ha recogido la bandera de Irun que ha pasado a formar parte de este Alarde tradicional. Y cuando han dado las 10.30 horas han comenzado las primeras descargas de artillería.

Las 19 compañías, con sus respectivas cantineras a la cabeza, han ido abandonando la plaza San Juan y han continuado hacia la plazoleta del Juncal, donde también se han producido descargas. El desfile del Alarde tradicional continuó como manda la tradición hacia la plazoleta del Juncal, donde también se han producido descargas. Después se ha vuelto al punto de partida. Pocos minutos antes de la mañana el recorrido matinal del Alarde tradicional ha finalizado, con muy buen sabor de boca. El tiempo ha acompañado, con una jornada soleada pero para nada asfixiante de calor.

Al mediodía las cantineras han llevado a cabo la ofrenda floral en la ermita del monte San Marcial para posteriormente hacer el cumplimiento de voto.

A las 10.20 horas, tal y como estaba previsto, ha tenido lugar la arrancada del Alarde público. Las diferentes compañías han ido llegando a la plaza San Juan y a las 10.50 horas ha aparecido la general, Inma Landa. Tras pasar revista, las compañías han empezado a desfilar por la ciudad.

Por la tarde, el desfile público ha dado comienzo en torno a las 17.15 horas, mientras que el Alarde tradicional ha salido las 18.30 horas.

Con esta fiesta, Irun recuerda a las tropas irunesas en la batalla de San Marcial que finalizó el 30 de junio de 1522 con la derrota de los soldados franceses en la Peña de Aldabe, evitando que se hicieran con el control de la ciudad fronteriza.