La unidad de Trastorno Mental Severo de San Juan de Dios ofrece un itinerario hacia la autonomía personal

La Unidad Residencial para Trastorno Mental Severo (URTMS) Plazaola del Hospital San Juan de Dios ofrece un itinerario hacia la autonomía a sus 32 residentes. La diputada general Eider Mendoza, en su visita este miércoles a esta unidad, señalaba que la directora Arantxa Picón «me ha gustado muchísimo la frase que ha utilizado, que decía que aquí se cuida y se sana a las personas con la mayor humanidad posible, y lo hemos visto»

Esta unidad funciona desde verano de 2023 en un antiguo pabellón de la comunidad de juandedianos y que durante la pandemia recibió a los casos más graves de la residencias de Gipuzkoa. Con una inversión de 2,8 millones de euros, y una subvención de foral de 725.000 euros, la unidad Plazaola acoge a 32 internos de 18 a 65 años distribuidos en 24 habitaciones individuales y 8 plazas en apartamentos de 1,3 y 4 personas. Monitores ocupacionales, integradores, psicólogos y enfermeras conducen los talleres que les ayuda a adquirir las habilidades para recuperar la autonomía. Realizan desde actividades psicoeducativas, manualidades, lectura fácil… hasta talleres para desenvolverse en la vida cotidiana.

«El objetivo es que adquieran las destrezas básicas para una vida autónoma fuera del hospital. Para ello, sobre todo en los apartamentos realizan tareas domésticas, como cocinar, hacer compras, limpiar, higiene personal, aprender a convivir» explica Ainhoa Izagirre, coordinadora de la unidad.

El zestoarra Andoni Arrieta reside en uno de los apartamentos. Asegura que «llevamos una vida tranquila, entretenida. Los médicos y enfermeros se involucran mucho con nosotros. De vez en cuando salimos de excursión en furgoneta a Aretxabaleta, a Eskoriatza, a Gasteiz…»

También realizan todas las labores domésticas. «Bajamos a Arrasate a hacer compras, luego preparamos la comida. A nosotros nos toca hacerlo el martes. Dos cocinan y los otros dos friegan, en turnos semanales». «Nos llevamos muy bien, vivimos en buena armonía y hermandad».

La bergaresa Inma Basail, también residente en uno de los apartamentos, contaba que «un día normal nos levantan pronto por megafonía, nos duchamos, bajamos al comedor a desayunar y luego a las 10 o así suelo ir a trabajar en la lavandería. Después de comerca me echo un poco la siesta y luego a la tarde ya salgo con mi chaval donde queramos, tenemos salidas libres. Los fines de semana también podemos ir de excursión en furgoneta».

Inma afirma que «he tenido una evolución bastante positiva» dentro de la URTMS, donde «hay buen ambiente, aunque algunos días igual te peleas con alguno, tienes mejor o peor genio, tal, pero bueno dentro lo que cabe bien, bastante bien».

Tal y como explica Arantxa Picón, directora gerente de San Juan de Dios Gipuzkoa, «eI modelo de atención que desarrollamos en la unidad Plazaola está en sintonía con la transformación que impulsa la Diputación Foral: una atención centrada en la persona, que pone el foco en el acompañamiento, los apoyos individualizados y la recuperación psicosocial. Nuestro compromiso es seguir avanzando en esta dirección, construyendo redes de apoyo sólidas que dignifiquen y mejoren la vida de las personas que atendemos»

La diputada general Eider Mendoza destacó en su visita a San Juan de Dios que «tenemos un territorio muy comprometido que se organiza para cuidar a las personas y hoy es un buen ejemplo de ello. Un territorio muy emprendedor que genera riqueza, una riqueza que luego sirve para ser un territorio muy solidario. Hablábamos antes que todas las rosas tienen espinas y que todas las personas tenemos altibajos a lo largo de la vida y tenemos que ofrecer servicios para cuidar a esas personas tal y como se hace aquí».

Mendoza aseguró que desde la Diputación Foral de Gipuzkoa «vamos a seguir apoyando este tipo de iniciativas. Hemos aprobado una convocatoria de ayudas de 11,5 millones para apoyar a todos aquellos servicios, tanto municipales como de otro tipo, para crear nuevos recursos o adaptar los recursos que se ofrecen actualmente, puesto que el objetivo es el del nexo con la comunidad, el de la innovación y por supuesto la personalización de todos en los servicios».

La diputada general agradeció la «enorme labor, la adaptación permanente de todas las personas y profesionales que trabajan aquí. Por supuesto también el esfuerzo que hemos podido ver hoy, también de las personas que están aquí, que viven aquí, que tienen todo un itinerario hasta llegar a la autonomía, el esfuerzo que hacen también para salir adelante y eso lo seguiremos haciendo de la mano».

La Diputación Foral de Gipuzkoa, a través de su Departamento de Cuidados y Políticas Sociales, ha abierto la convocatoria de 2025 de subvenciones destinadas a la inversión en centros de servicios sociales en el Territorio Histórico de Gipuzkoa. El presupuesto total asignado para esta iniciativa asciende a 11.500.000 euros, y el plazo para presentar solicitudes permanecerá abierto hasta el 22 de mayo.

Estas subvenciones se inscriben en el marco del Mapa de Servicios Sociales de Gipuzkoa, una herramienta estratégica de planificación diseñada para adecuar la red pública de servicios sociales a las necesidades sociales emergentes y garantizar una distribución territorial equilibrada. Su finalidad es mejorar la calidad de los cuidados, acercar los servicios a las personas usuarias y responder de manera eficaz a la demanda prevista, contribuyendo así al bienestar integral de las personas más vulnerables de la sociedad guipuzcoana.

A través de esta convocatoria, la Diputación Foral de Gipuzkoa reafirma su compromiso de impulsar una red de equipamientos sociales moderna, accesible y de calidad, fomentando tanto la creación de nuevos centros como la mejora de los existentes en todo el territorio. Así, apuesta por un sistema de servicios sociales eficiente, innovador y cercano, capaz de adaptarse a los retos sociales actuales y futuros. Las subvenciones se estructuran en cinco líneas de actuación y están dirigidas a entidades locales del territorio para la creación de nuevos centros de competencia municipal; entidades para la ampliación, reforma y/o adecuación de centros de competencia municipal ya existentes; entidades privadas para la creación de nuevos centros de servicios sociales; entidades privadas para la ampliación, reforma y/o adecuación de centros existentes; y entidades del tercer sector social para inversiones en sus sedes.