«Colombia es un país que en muchas cosas está muy avanzado»

– ¿En qué va a centrar la charla 'Colombia y las mariposas amarillas'?

– El título hace referencia a las mariposas de Gabriel García Márquez, y pretende ser un viaje por el país al que llegué hace 13 años. Vamos a recorrer y conocer Colombia desde las experiencias y vivencias de una comunicadora villabonatarra que llegó a un país que no conocía y se quedó.

– ¿Qué la atrapó?

– La alegría de la gente, su cultura, y su filosofía de vida. Vivir y disfrutar del hoy y no estar pensando ni planeando el mañana.

– ¿Cuáles son los acontecimientos que más le han marcado?

– Realmente, es difícil elegir porque son muchos. Me marcó, recién llegada en 2011, la cárcel de Honduras que se quemó con más de 300 presos dentro, y sus madres sollozando fuera, también todos los viajes a Venezuela con la enfermedad y la muerte de Hugo Chávez, la semana que pasamos incomunicadas en los campamentos de las FARC a una semana de firmarse la paz de Colombia, el fuertísimo terremoto en Ecuador de 2016, toda la revuelta de manifestaciones de 2019 en Chile, Ecuador, Perú y Colombia, y las diferentes elecciones presidenciales de Latinoamérica, donde cambia la historia de un país.

– ¿Cuáles serían sus consejos para las mujeres periodistas que están interesadas en trabajar como corresponsales a nivel internacional?

– Que se animen, sin ninguna duda. Sentir miedo ante lo desconocido es normal, pero el viaje es maravilloso y es un trabajo apasionante. Conoces mucha gente muy interesante, vives momentos históricos y creces a nivel profesional y personal.

– Colombia es el país que ha recibido el mayor número de migrantes venezolanos. Se trata de un fenómeno que ha ido incrementándose en los últimos años. Sin embargo, la percepción de que el país fue «generoso», «abierto» y «ejemplo mundial» hacia la migración venezolana parece haber cambiado...

– Sí, actualmente en Colombia viven casi tres millones de venezolanos y venezolanas, el 40 % de la migración venezolana, que han ido llegando de manera masiva al país, aunque en los últimos meses ha descendido la cifra, porque muchos han comenzado a regresar. Tristemente, para la población migrante es muy difícil sobrevivir en condiciones dignas en un país que tiene muchas desigualdades sociales, mucha inseguridad y violencia, y donde millones de personas viven en la pobreza extrema. Además, los venezolanos sufren de mucha estigmatización y discriminación, pero no solo en Colombia.

– ¿Qué cambios observa en la cobertura mediática y la libertad de prensa durante su tiempo como corresponsal?

– La prensa internacional es muy respetada en Latinoamérica normalmente, porque consideran que contamos la verdad, sin intereses con los respectivos gobiernos. En las calles latinoamericanas, en las diferentes protestas y manifestaciones que cubrimos, la gente nos protege y siento que valoran y agradecen nuestro trabajo.

– ¿Cómo percibe la relación actual entre Colombia y otros países a nivel internacional?

– Creo que con la llegada del presidente Gustavo Petro las relaciones internacionales han mejorado respecto a los gobiernos anteriores y es algo que él quiere seguir potenciando.

– ¿Cómo ha cambiado el país desde el último cambio de gobierno?

– El gobierno del primer presidente de izquierdas de la historia colombiana está teniendo muchas dificultades para gobernar y sacar adelante sus propuestas y leyes. La oposición, acostumbrada siempre a gobernar y controlar absolutamente todo, no se lo está poniendo nada fácil. Ya lo dijo el propio Petro, que él es el presidente, pero no tiene el poder. Su objetivo principal es lograr la paz total, devolver las tierras a los campesinos y reducir la pobreza. Las expectativas y la ilusión eran muy altas, y la gente quiere resultados rápidos, pero en cuatro años de gobierno, no le va a dar tiempo a cambiar años de historia y gobiernos de derechas, pero la gente sigue esperanzada en lograr ese cambio.

– ¿Cuál es la situación actual del conflicto armado en Colombia y cómo está afectando a las comunidades locales? Leo que en 2023 al menos 58.000 indígenas fueron víctimas de violencia. ¿Qué está sucediendo?

– Sí, lamentablemente la firma de la paz no trajo la paz total a Colombia y miles de personas siguen sufriendo las consecuencias de un conflicto armado de más de 50 años. Miles de colombianos, especialmente indígenas y afrodescendientes, están amenazados y son desplazados de sus territorios, teniendo que abandonar sus casas. La cifra más alta de líderes sociales asesinados en los últimos años se registra en Colombia. Más de 100 defensores sociales y de derechos humanos son asesinados cada año. Es una situación sumamente preocupante.

– En los últimos años viajar a Colombia se ha vuelto muy popular entre los turistas…

– Sí, después de la firma de la paz el turismo internacional ha aumentado mucho en Colombia, y cada vez vemos más gente de Estados Unidos y de Europa también de Euskal Herria, que viaja o se muda tras conocer este país tan diverso, con tantos paisajes diferentes y lugares por descubrir.

– ¿Cómo nos ven?

– Creo que nos ven como gente trabajadora y leal.

– El país está inmerso en un proceso de política nacional de drogas que busca reducir la producción de cocaína. ¿Hacia qué dirección se dirige este proceso y cómo está siendo percibido?

– Así es, el gobierno colombiano quiere reducir en un 40% la producción de cocaína en los tres años que le quedan de gobierno, pero el negocio y el problema de las drogas es global, y su intención es incidir en el debate internacional, porque no es un cambio que pueda hacer un país en solitario. De hecho, los presidentes de México y Colombia han unido voces para pedir el cambio de enfoque y la estrategia en la guerra contra las drogas.

– ¿Ha observado cambios en la representación y participación de la mujer en la sociedad colombiana a lo largo de su carrera?

– Si, durante los últimos años las mujeres ocupan más lugares significativos en la política y en los puestos destacados, igual que en el resto del mundo. Pero en países como Colombia, donde hay millones de mujeres cabezas de hogar, que por diversos motivos tienen que sacar adelante ellas solas a su familia, sus hijos y su casa, es muy importante. La mujer colombiana es muy luchadora, y esa fuerza también se ve representada en los espacios públicos, en las universidades, o en el Congreso. Hemos tenido la primera mujer lesbiana alcaldesa de Bogotá, y ahora tenemos la primera vicepresidenta negra en la historia de Colombia. Creo que es un país que en muchas cosas está muy avanzado.