Tolosa

La arquitectura de Tolosa, herencia que proteger

El Consistorio, desde 2022, mantiene abierto un proceso de renovación de este catálogo. Siguiendo las indicaciones del departamento cultural del Gobierno Vasco, se han seleccionado y analizado 48 inmuebles no incluidos anteriormente en el documento municipal, y tras el estudio pertinente, el informe concluye que 41 de ellos tienen el interés histórico y arquitectónico suficiente para estar protegidos como bien cultural y simbólico del paso del tiempo.

Porque, entre todas sus características, estos edificios son garantes de la memoria de lo que un día fue la localidad y lo que es hoy en día. Por lo que, en otras palabras, desde Plaza Zaharra se están dando pasos para que se proteja la herencia de la villa. Con este estudio y la aprobación de cierre de su expediente por parte del Pleno, en la sesión celebrada en junio, el próximo paso será la aprobación con carácter inicial del expediente de elaboración del Catálogo Municipal de Patrimonio. Esto es, la inclusión de las fichas elaboradas de los 41 edificios residenciales e institucionales.

Por tanto, junto a la Villa Sagrado Corazón, el estudio arroja la posibilidad de protección de edificios como el hostal Oyarbide, el del Banco Guipuzcoano, Bidezainen Etxea, Villa Pepita, Villa Jesusa y Villa María, Eguzki Toki, Ureta Etxea, la casa Mocoroa y Arkaute Etxea, entre otros. La lista completa se puede consultar en la ficha que acompaña este reportaje. Corresponden todos ellos a edificios de carácter de chalet, residenciales e institucionales. Con cada uno de los elementos se ha realizado un estudio patrimonial y una ficha con sus características históricas, su evolución y conclusiones sobre su valor arquitectónico.

Sin embargo, siete de ellos han sido rechazados. Se trata de la vivienda de trabajadores de la fábrica Guadalupe 55-2, la casa de la calle Igeralde 17-19, las viviendas del grupo Bizkaia 11-15 (Sputniks) y cuatro edificios en Felipe Gorriti, San Francisco, Santa Clara y Zumalakarregi. Las razones por las que no se podrán proteger está que han sufrido obras profundas que han adaptado su aspecto original, que no representan lo suficiente a los edificios de la época a la que pertenecen o por falta de información sobre la historia de los mismos.

Realizando esta ampliación, los inmuebles de valor arquitectónico serían declarados bienes culturales de protección básica en el municipio, lo que añadiría una capa de seguridad ante intervenciones futuras, para evitar que desaparezcan y se respete su volumetría, imagen exterior y distribución tipológica y estructural básica, manteniendo el material original de la estructura y basándose en las categorías de intervención. Tal y como establece la Ley de Patrimonio Cultural Vasco, que un inmueble sea catalogado dentro cualquiera de los tres niveles de protección que marca el texto –especial, media y básica– supondrá que cualquier intervención en su estructura o fachada tenga que pasar por un proceso de evaluación y aprobación para garantizar que se seguirá conservando conforme a sus valores arquitectónicos y culturales.

De esta manera, y con el voto favorable de EH Bildu y la abstención de la oposición, conformada por EAJ-PNV y PSE-EE, en el Pleno ordinario de junio, estos 41 edificios seleccionados tendrán en un futuro una protección superior, aunque todavía queda camino por recorrer.

Asimismo, el voto incluía la decisión de suspender cualquier tipo de obra que afecte a la fachada de estos edificios o su demolición total hasta que se adopte el acuerdo de aprobación inicial de la modificación del catálogo del PGOU. Esta medida afectará como máximo hasta un mes, por lo que puede esperarse que esta valoración se dé antes de que finalice el verano de 2026. El objetivo es que, dentro del proceso de estudio y catalogación de los inmuebles, no haya situaciones que lleven a su pérdida.

La última revisión de esta lista de inmuebles que salvaguardar fue en 2009, y ya desde hace tres años se viene avanzando hacia su actualización. En diciembre de 2022, el Ayuntamiento solicitó la información referida a la localidad a la Dirección de Patrimonio Cultural del departamento de Cultura y Política Lingüística del Gobierno Vasco, dando como resultado una diferencia entre lo catalogado por el ente municipal y el autonómico. El patrimonio registrado por el Ejecutivo era superior en número que el del archivo municipal, por lo que se decidió activar los mecanismos para dar una solución a este desajuste y blindarlos. Siguiendo las propuestas realizadas por el órgano superior, se seleccionaron 47 edificios –posteriormente serían 48, con el estudio del edificio Mocoroa, en la calle Santa Clara– y tras su análisis, se buscará incluir 41 edificios, ubicados en todas la extensión de la localidad, en el mencionado catálogo.

Los palacios y casas señoriales, edificios residenciales o institucionales, con sus diferentes estilos arquitectónicos y levantados en diferentes épocas y por diversos motivos, constituyen la seña distintiva de Tolosa y cuentan su historia. Sus fachadas son los anillos de los árboles que conforman el bosque, el recuerdo de lo que perdura, el urbanismo que se mantiene en pie y que engalana las calles con sus líneas rectas y fachadas vistosas.