Inicio de rebajas tranquilo en Ordizia

Ayer comenzó la temporada de rebajas de enero para los comercios. Como primer día, en Ordizia las tiendas disfrutaron de una mañana tranquila en la que se mezclaban los que iban a cambiar regalos con quienes habían esperado a las rebajas. Tras los días de ventas navideñas, algunos incluso se tomaron la mañana de ayer de descanso, aunque la mayoría decidió abrir. «Este día es golosísimo para hacer fiesta. Pero también es un día que la gente que trabaja entre semana puede hacer los cambios. A la tarde no abrimos los sábados y hemos decidido abrir, das un servicio también», comentaba Yolanda en la Merceria Arantxa.

El tiempo lluvioso no ayudaba a salir de casa. Sin embargo, desde primera hora ya se apreciaba movimiento en las tiendas. «Ha habido bastante movimiento desde que hemos abierto a las diez. Los que salen a hacer los encargos primero y hasta última hora hemos tenido gente», comentaba Anaitze, en la tienda de ropa Serendipity, con locales en Beasain y Tolosa. El final de la temporada navideña y el comienzo de las rebajas se mezclaban en el local. «Algunos eran para cambiar regalos, pero también han venido a interesarse por las rebajas».

Los últimos meses, con los comercios enfocados en las prendas de invierno, pero con temperaturas más agradables en la calle, todos los comercios han notado en mayor o menor medida su efecto en las ventas. «La campaña de Navidad ha ido bien, pero ha hecho muy buen tiempo y la gente no ha visto la necesidad de calzado de invierno», explicaba Izaro, en la zapatería Oskarbi, que también cuenta con otras cinco tiendas en Gipuzkoa y una más en Bizkaia. «Cuando hace invierno, entonces sí que se venden más GoreTex y ese tipo de productos, pero este año poco».

En la mercería, en cambio, admiten que han notado el cambio, tanto por las temperaturas, como por los nuevos hábitos. «Un pijama gordo, una camiseta térmica... todas esas cosas están paradas. Nosotros también miramos al cielo, como los del campo», explicaba Yolanda. «Es verdad que los que tienen ropa de calle, chamarras gruesas y todo esto, todavía les afecta más. Porque las ves y como no ha hecho invierno este año, tampoco les haces caso. Pero siempre afecta».

Todos los comercios admitían haber trabajado bien en la campaña de Navidad, «todavía se mantiene la tradición de hacer regalos», explicaba Anaitze. En Serendipity «estos primeros días suelen ser más para cambios, por las tallas o para cambiar por otros regalos», donde tienen descuentos del 10 y del 30%. Admite que «si necesitas vienes, te lo pruebas...». En las prendas más importantes, «como puede ser un abrigo, es posible que la gente espere un poco» a ver los descuentos de las rebajas.

En Oskarbi sí que han apreciado este año que «la gente está esperando las rebajas». En su local, la mayoría del calzado está con un 20 y un 30% de descuento, «tenemos algunas al 50%», aunque ayer por la mañana con el trajín de los clientes no les había dado tiempo a colocar todo en su lugar. «Cuando pasen dos o tres semanas, solemos aumentar la rebaja».

En la Mercería Arantxa, en cambio, su clientela disfrutará de descuentos, pero no se han apuntado a las rebajas. «Hace algunos años que decidimos no participar. Lo que la gente no sabe es que hay que pedir permiso, avisar qué días vas a hacer, y pagar la gestoría por el trámite si quieres hacer rebajas. Nosotras hacemos descuentos. Al final al que viene siempre le haces algo, juegas con eso».

Mientras retiraban la decoración navideña, destacaban la dificultad del pequeño comercio. «La campaña de Navidad la hemos salvado, hemos trabajado. Nada es lo que era antes. La pandemia ha hecho que mucha gente cambie el funcionamiento. Antes las navidades eran mucho de regalos físicos y ahora hay otro tipo de regalos». En su caso, la digitalización ni se la plantean. «Nos dicen que nos metamos en ventas online. Precisamente para la gente que estamos en contra de esas multinacionales estamos nosotras aquí. Lo tocas, lo ves, lo pruebas... Todas esas cosas hay que empezar a valorar», incide.

Temas

• Ordizia