Un latido de tambores y emociones
Javier García Cogorro | Presidente de Viralgen
Domingo, 21 de enero 2024, 01:00
Secciones
Servicios
Destacamos
Javier García Cogorro | Presidente de Viralgen
Domingo, 21 de enero 2024, 01:00
Todo comenzó un 19 de enero de 2017 cuando tuve el privilegio de sumergirme en los preparativos del Día de San Sebastián por primera vez. Aunque intuía que algo extraordinario estaba por suceder, no podía prever la magnitud de su significado. No pude quedarme en la ciudad ese día pero me fui con la promesa silenciosa de regresar algún año para vivir el día grande en Donostia.
Finalmente, ese día llegó en 2023, y con él, la culminación de una experiencia única que se convirtió en mi gran día. Y como si el destino lo hubiera planeado, fui honrado con el Tambor de Oro de la ciudad, un momento que resuena en mi memoria como el golpear apasionado de los tambores. Disfruté de la fiesta en toda su plenitud, rodeado de seres queridos y de personas que sin conocerme me abrían las puertas a su gran día.
Cada momento fue inolvidable, y me sentí como en casa. Desde la cena en Gaztelubide, al salir como barril en la Izada por la Parte Vieja, el arranque de la Tamborrada Infantil, la emoción de recibir el Tambor de Oro (¡qué momento!), recorrer las calles disfrutando de las tamborradas y culminar con la emocionante Arriada y la visita a la Unión Artesana.
Si existiera una pócima que pudiera convertirte en donostiarra en 24 horas, yo la tomé ese día. Y aunque el año haya pasado volando, los recuerdos de esa jornada siguen tan nítidos como ese día. Ahora, a la espera del Día de San Sebastián, siento la emoción y la llamada para revivirlo y disfrutarlo de nuevo.
Marqué ese día en el calendario de mi vida de forma perpetua, y mi intención es disfrutarlo con la misma intensidad que la primera vez. Dejándome llevar por la fiesta, sumergiéndome en la emoción y abrazando el cálido espíritu de la gente de San Sebastián. Porque, una vez al año, el mundo se detiene en Donostia durante un solo día al compás de los tambores y de la música de Sarriegui. Esto es Donostia, quien lo probó lo sabe, ¡¡¡y el que no, debe hacerlo!!!
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
No te pierdas...
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.