Zonas de baño alternativas en Gipuzkoa para huir de la playa

Existen variados remedios para combatir el calor. Los que tienen la fortuna de vivir junto al mar, seguro que han pensado en el próximo baño que se van a dar en la playa de su localidad. Sin embargo, no todos los guipuzcoanos gozan del privilegio de tener un arenal a mano, por lo que tienen que buscarse alternativas para poder ponerse a remojo y combatir las altas temperaturas. Eso sí, por fortuna vivimos en un territorio rodeado de espectaculares parajes naturales que nos ofrecen infinidad de oportunidades y, por supuesto, varias alternativas de baño a las playas costeras.

El río Urumea es uno de los más largos del territorio. Cruza de sur a norte prácticamente toda Gipuzkoa hasta desembocar en San Sebastián. Antes, eso sí, aporta una zona de aguas tranquilas más o menos a la altura del barrio hernaniarra de Pagoaga, perfecta para poder pegarse un chapuzón. Es verdad que no es una zona que esté habilitada precisamente para esta actividad por las muchas rocas y piedras que cubren el espacio, pero el entorno y las aguas cristalinas sin duda que merecen realizar ese esfuerzo. Por si fuera poco, en la zona de Fagollaga incluso se puede transitar en kayak.

Esta alternativa cuenta con agua salada en vez de dulce, como todas las playas de Gipuzkoa. Sin embargo, ofrece la opción de salir del bullicio que suele haber en verano en la mayoría de arenales. Es una zona cubierta por todas las necesidades básicas para bañarse de forma segura en unas aguas que son revueltas por las mareas que azotan la costa mutrikuarra. Con bajamar, es el muro que da forma a la piscina olímpica la que retiene el agua. Una de las opciones más diferentes de la lista, sin lugar a dudas.

Este lugar de baño que fue habitual durante muchos años para la gente local ha vuelto a ser habilitado para su disfrute hace unos pocos. Los vecinos acondicionaron el camino que llega hasta la poza y también decidieron limpiar la zona para poder refrescarse en un marco natural incomparable. Está situado cerca de la presa de Mertxan.

En la poza Usako de Oñati no está permitido el baño en la actualidad por el mal estado de las aguas, según ha repetido varias veces el Ayuntamiento de Oñati en lo que va de verano. Las pruebas para comprobar la calidad del entorno se realizan continuamente, por lo que no hay que descartar una pronta apertura. Así, si se da el caso, todo aquel que se acerque podrá disfrutar de una poza natural que se forma en el río Aranzazu. Al pie de su cascada podrán disfrutar de uno de los lugares mejor escondidos de toda Gipuzkoa. Apenas se necesitan 15 minutos andando o 10 por la vía verde en bici para llegar a un lugar perfectamente habilitado con duchas, papeleras, fuente, aparcamiento y zona habilitada para tomar el sol. Todo un tesoro oculto y prohibido, por el momento.

Es la única alternativa de la lista situada fuera de nuestro territorio histórico. De todas formas, su cercanía con nuestra provincia y sus tres playas con zonas recreativas y equipadas con todo lo esencial harán que el pantano sea una de las opciones más consideradas de todas las que se aportan. Así, en medio del lago también hay varios islotes a los que se puede llegar fácilmente recorriendo las tranquilas aguas en piragua, kayak o paddle surf. Una de las islas es la de Zuaza, típica por albergar un campamento muy transitado en verano y últimos días del curso por estudiantes.