Investigan la violación múltiple de una menor de 17 años en Plentzia

Fue una amiga de la adolescente la que dio aviso a la Ertzain­tza sobre las dos y media de la madrugada del pasado domingo. Los hechos se produjeron en la playa después de que la muchacha se alejara de sus amigas. Al parecer, la cuadrilla se encontraba en la zona del espigón de Arkote cuando se separaron. Según la joven, un primer muchacho se sobrepasó con ella en la playa en plena madrugada y en medio de la oscuridad, y después se unió a los tocamientos al menos otro más, que se iluminaba con la linterna de un teléfono móvil. Un tercero podría haber intentado mediar. La Policía autónoma trata de aclarar si había más individuos porque un testigo cifra en cinco los jóvenes que estaban en el espigón, algunos de los cuales agredieron presuntamente a la chica.

Según la denuncia de la muchacha, hubo una violación consumada. Tras ser atendida en el servicio de ginecología de un hospital y abrirse el protocolo de agresiones sexuales, la chica formalizó la denuncia por escrito en una sede policial.

Una vez se hizo pública la noticia de la agresión sexual, la asociación feminista del municipio, Sorginen Alabak, convocó una concentración de repulsa a las ocho de la tarde. Más de mil personas, en su mayoría jóvenes, se concentraron durante un cuarto de hora en la zona del puerto de la localidad para solidarizarse con la víctima y mostrar su condena contra este tipo de delitos. El colectivo elaboró un comunicado que se leyó a la conclusión del acto, donde también se corearon diferentes consignas. Además, algunos asistentes portaron carteles en los que denunciaban los ataques contra las mujeres. Desde el Ayuntamiento costero informaron de que hoy está prevista la celebración de una Junta de Portavoces, a las 13.00 horas, donde se valorará lo ocurrido este fin de semana.

A lo largo del verano, Plentzia se ha convertido en un punto de reunión de numerosos jóvenes de todo el territorio. Se han producido varios episodios de botellones y desalojos por parte de la Ertzaintza con incidentes de diversa gravedad. De hecho, la alcaldesa, Elixabete Uribarri, llegó a reclamar al Departamento de Interior que reforzara la vigilancia ante el cariz violento que estaban tomando las concentraciones de jóvenes.

La regidora envió una carta a los responsables de la comisaría de la Ertzaintza en Getxo en la que les «rogaba» que enviaran más efectivos al municipio. «Se lo pido antes de que ocurra una desgracia de la que tengamos que lamentarnos», argumentó Uribarri.