Barajas reabre su espacio aéreo tras un cierre de 80 minutos por el vuelo de un dron no identificado

El aeródromo ha comenzado a reabrir el tráfico pasadas las 14 horas con el aterrizaje de los primeros aparatos. A las 14:20 volvían a estar operativas las cuatro pistas de Barajas y se recuperaba la normalidad con más de cien operaciones a la hora.

Todo ha comenzado a las 12:40, cuando el Ministerio de Transportes se ha visto obligado a activar el procedimiento de desvíos masivos de vuelos a los aeropuertos de Valencia, Barcelona, Alicante-Elche, Valladolid y Zaragoza, según han informado fuentes de la seguridad del Estado. Al menos 26 aparatos han tenido que tomar tierra en otros aeródromos al no tener autonomía para mantenerse sobrevolando el aeropuerto.

Todas las alertas han saltado cuando dos pilotos de aerolíneas comerciales han notificado esta mañana el avistamiento de un dron de un tamaño considerable y a «gran altura» en las inmediaciones de Barajas. De inmediato, y siguiendo los protocolos de seguridad, el gestor aéreo ha confirmado que no se trataba de un aparato con permiso por lo que se ha dado la orden más radical: 'Rate 0', que impide el despegue y aterrizaje de aviones en el aeropuerto. Durante el tiempo de la alerta, solo se ha dejado operativa la pista 32L, aunque solo para aproximaciones de urgencia por falta de combustible.

Casi al mismo tiempo han sido desplegados por las inmediaciones del aeropuerto patrullas de la Guardia Civil y de la Policía Nacional en un operativo conjunto para tratar de localizar al piloto del este dron, según han relatado mandos de la investigación.

La activación de la alerta ha provocado la reunión inmediato del comité de crisis formado por el gestor de los aeropuertos, Aena, el gestor de navegación Enaire, la Agencia de Seguridad Aérea (AESA) y la Guardia Civil.

Enaire ha recordado que los drones «no son juguetes». Para volar un dron en espacio aéreo controlado se requiere previamente un estudio aeronáutico de seguridad que analice y mitigue los posibles riesgos y una vez obtenida la autorización de la Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA), contactar con el Departamento de Coordinación Operativa de Espacio Aéreo de Enaire para coordinar su operación (cop@enaire.es).

Existe a disposición de pilotos y operadores de drones una web específica y la aplicación drones.enaire.es, con datos de información aeronáutica para la identificación de posibles restricciones para volar drones en un determinado espacio aéreo de acuerdo con la legislación vigente.

La Agencia Estatal de Seguridad Aérea (Aesa), ha puesto un tuit en el que recuerda que volar drones en las proximidades de un aeropuerto es una infracción «grave» y que las sanciones pueden alcanzar los 90.000 euros.

El cierre del espacio aéreo está provocando retrasos en decenas de vuelos en una jornada muy complicada, ya que la niebla, a primer ahora del día, ya había causado demoras importantes en numerosos viajes.

La utilización de drones está regulada en la disposición adicional segunda del RD 1036/2017, sobre el uso de las aeronaves pilotadas por control remoto. Nunca se puede volar un dron a menos de 8 kilómetros de aeropuertos o aeródromo. La normativa recalca que siempre hay que tener el aparato a la vista, y no volar a más de 120 metros del suelo. Solo volar de día, en condiciones meteorológicas adecuadas (sin niebla, sin lluvia y sin viento).

Sólo se puede volar el dron sobre edificios, o reuniones de personas al aire libre si éste pesa menos de 250 gramos y no se vuela a más de 20 metros de altura. Si pesa más de 250 gramos no se puede volar ni sobre edificios ni personas y tiene que volar en zonas adecuadas para ello, sin poner en peligro a otras personas ni a otras aeronaves en espacio aéreo no controlado.

Se puede volar de noche el dron, siempre que no pese más de 2 kilos y no se superen los 50 metros de altura. Aunque, si pesa menos de 250 gramos, la altura no puede superar los 20 metros.