Osakidetza corrige su modelo de OPE para evitar filtraciones en los exámenes

Las novedades afectarán a veintidós plazas correspondientes a especialidades médicas y cuatro plazas de facultativo técnico biológico. Esta decisión la toma la consejería que dirige Nekane Murga tras lograr un acuerdo con los sindicatos Satse, UGT y Sindicato Médico. La medida responde «a la voluntad y compromiso adquirido por el departamento y Osakidetza ante el Parlamento Vasco de crear un nuevo modelo de OPE», señaló ayer en rueda de prensa Juan Luis Diego, director general del Servicio Vasco de Salud.

Entre la docena de medidas que se pondrán en práctica en octubre, tres son las más significativas. Para empezar, la selección de los miembros de los tribunales se realizará por sorteo. En caso de que no haya suficientes especialistas de una disciplina médica se podría acudir a profesionales del mismo área específica del Sistema Nacional de Salud. Todos ellos conocerán el contenido de las pruebas dos horas antes de que se celebren. Los elegidos para formar parte de los tribunales, recibirán una jornada de formación. En segundo lugar, se acudirá a especialistas externos de fuera de Euskadi para la elaboración de la prueba teórica y, «en estas convocatorias, con carácter transitorio, también en las pruebas prácticas». La elaboración de estas últimas pruebas «se realizará esta vez» y también con carácter transitorio «por especialistas externos» bajo la dirección, seguimiento y custodia del Instituto Vasco de Administración Pública (IVAP). Por último, los exámenes serán tipo test, tanto la prueba teórica como la práctica. En estas últimas pruebas está el cambio más significativo. Según anunció el director general de Osakidetza «se confeccionarán ocho opciones y antes del examen se decidirá a sorteo los cinco que se aplicarán». Hasta la fecha, en las pruebas prácticas, se planteaba a los opositores un caso que debían desarrollar.

Con la elección de este modelo, las pruebas serán corregidas el mismo día de la convocatoria. Eso sí, los resultados serán analizados a nivel psicométrico para detectar posibles irregularidades en las notas antes de hacerlas públicas. En caso de que las haya, quedarán embargadas. La administración quiere detectar así posibles resultados anómalos como ocurrió con las especialidades médicas puestas en solfa por sindicatos y partidos políticos de la oposición al Gobierno Vasco y que investiga, a instancias de la Fiscalía del País Vasco, la jueza Yolanda Varona.

Además, el acuerdo entre Salud y los tres sindicatos recoge «explícitamente» en un documento las obligaciones éticas y las normas de conducta que deberán respetar los componentes del tribunal y su obligación «de aceptar la condición de miembro de tribunal salvo concurrencia de las causas de abstención y/o recusación debidamente acreditadas». La confección de las pruebas, por su parte, no se encomendará a una sola persona y se especificará en la convocatoria que la vinculación de los exámenes es «al temario y a la bibliografía». En cuanto a la custodia de las pruebas, será el IVAP el encargado de esta tarea. Solo este instituto, dependiente del Gobierno Vasco, sabrá qué expertos de fuera de Euskadi preparan los ejercicios y deberá dejar constancia de todas las personas que han tenido acceso a las pruebas en todo el proceso.

Tanto desde la dirección general de Osakidetza como de los tres sindicatos firmantes del acuerdo, que son los mismos que apoyaron las condiciones de la OPE 2016-2017 y que integran la Comisión de Seguimiento de la misma, ven en la convocatoria de octubre la «oportunidad para incorporar algunas de las medidas propuestas» por diferentes agentes, en particular, por el Ararteko y el propio IVAP. En este sentido, el director general del Servicio Vasco de Salud subrayó que esta docena de medidas se aplicarán en las pruebas de octubre con el objetivo de que sea una convocatoria «modélica desde la perspectiva de la objetividad, la transparencia y la máxima garantía» de los principios de igualdad, mérito y capacidad. También avanzó que parte de esta docena de medidas se mantendrán en futuras oposiciones, «en cuyo modelo trabaja el Departamento vasco de Salud para llevarlo en los próximos meses al Parlamento». Solo el próximo año Osakidetza tiene previsto convocar otras mil plazas más. Sin embargo, dejó claro que otras de las medidas se aplicarán de forma «transitoria» en octubre, como es el caso de las pruebas preparadas fuera de la CAV.

No quiso relacionar directamente Juan Luis Diego la judicialización del caso OPE por presuntos amaños en al menos once especialidades médicas con estas doce novedosas medidas. Sin embargo, sí reconoció que el modelo vigente puede estar cerca del «agotamiento» y que el desarrollo de la OPE puesta en cuestión tenía «margen de mejora». Algo que ya manifestó el pasado 28 de diciembre Jon Darpón, consejero de Salud que dejo su cargo el 14 de marzo por este caso. Este admitió que «forzosamente el sistema va a cambiar para continuar eligiendo a las mejores personas», y para hacerlo «en igualdad de oportunidades». Por último, confirman desde el Departamento vasco de Salud que estas nuevas medidas anunciadas ayer para evitar filtraciones solo se aplicarán a las especialidades que estaban pendientes de realizar y no a los cinco exámenes de la OPE que han de repetirse, los dos ejercicios de Angiología y Anestesia y la prueba práctica de Cardiología.