Más de 230 jóvenes se quedaron sin Gaztelagun por los límites excesivos
La corrección de los ingresos mínimos y máximos y de la edad abre de nuevo esta ayuda al alquiler a personas que fueron rechazadas el pasado año
Si Gaztelagun no hubiera sido tan exigente en su arranque ahora, es posible, que 239 jóvenes más se estuvieran beneficiando de la ayuda al ... alquiler que les fue denegada, y que les habría facilitado su emancipación. El Gobierno Vasco ha cuantificado el número de personas que se vieron perjudicadas por los requisitos de edad e ingresos establecidos en un inicio, pero que hace un mes fueron flexibilizados dado el elevado porcentaje de solicitudes rechazadas.
En concreto, según especifica el Departamento de Vivienda que lidera Iñaki Arriola en una respuesta parlamentaria a EH Bildu, hubo 165 jóvenes que deberían haber percibido la ayuda de hasta el 60% de la renta -con un tope de 250 euros- pero que quedaron fuera por no llegar a los ingresos mínimos. Ahora, ese nivel se ha establecido en 3.000 euros, como el resto de solicitantes de Etxebide, pero la exigencia inicial los vinculaba a la RGI lo que elevaba la cifra a más de 8.000 euros. Arriola especifica que de las 228 solicitudes denegadas por no ingresar el mínimo, en el 72% de los casos sí superaban el límite actual, por lo que «estas personas hubieran podido ser beneficiarias».
Del mismo modo, de las 126 peticiones rechazadas por excederse del máximo permitido, 74 (el 58%) sí cumplen ahora los nuevos niveles de ingresos, ampliados tanto en caso de perceptores únicos hasta 18.000 euros como de unidades convivenciales, hasta los 28.000. En otros 23 casos se denegó la solicitud por no cumplir con la edad, aunque no se especifica cuántos entran dentro de la ahora permitida, desde los 18 a los 35 años. El consejero sabe que la modificación que entró en vigor el pasado 18 de diciembre abrirá de nuevo la puerta a estas personas, a las que avisará del cambio, y a otras muchas que habían desistido siquiera de intentarlo. Aunque «es muy complejo estimar» el número, justifica.
Este programa, que pretende llegar a cientos de jóvenes más durante los próximos dos años de vigencia, ayuda ahora a 716. Son pocos en comparación de las 1.687 solicitudes recibidas el pasado año, de las que se denegaron 465 o se archivaron otras 346, entre otras de las razones administrativas para que sus titulares no estén cobrando. 32 jóvenes están a la espera de respuesta.
Entre los expedientes denegados, 36 lo fueron porque sus alquileres superaban las rentas máximas permitidas por municipio, unas medias que el Ejecutivo cree razonables y por tanto no ha cambiado. Esos precios medios impiden por ejemplo superar los 750 euros en Donostia, la capital más cara con una renta media de 859 euros, o los 600 en Zarautz, con una renta media de 750 euros. Pero «aunque sí es verdad que determinadas ubicaciones y tipologías de viviendas no encajan con el programa, constatamos que existe un número considerable de viviendas que sí lo hacen», por lo que «no es cierto que se deje fuera a la mayoría de jóvenes de las capitales», justifica Arriola.
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