Jefes de servicio piden «respeto» para los médicos imputados por la OPE

La fiscal superior del País Vasco, Carmen Adán, acusa a tres especialistas de Osakidetza de un delito de «filtración de secretos por funcionario público», por el que podrían ser castigados con tres años de prisión. Los tres sospechosos -la jefa de servicio de Angiología del hospital de Basurto, Reyes Vega Manrique; el jefe de servicio de Anestesia del hospital Araba, César Augusto Valero; y el recién nombrado jefe de servicio de Digestivo del hospital de Galdakao, José Luis Cabriada Nuño- están directamente relacionados, al parecer, con las irregularidades detectadas en Anestesia, Angiología y Digestivo.

Además, la juez instructora del caso, Yolanda Varona, siguiendo la recomendación de la fiscal superior, ha previsto llamar a declarar en último lugar a tres directivos de Osakidetza, por si su condición de testigos pasara a ser la de imputados, en función de lo que se descubra en la investigación. Son el dimitido director de Recursos Humanos, Juan Carlos Soto; el subdirector del área, Xabier Balerdi; y el director de Planificación Sanitaria, Andoni Arcelay.

El autodenominado Foro de Médicos Especialistas de Osakidetza ha esperado a la dimisión del anterior consejero para elaborar un escrito con sus «reflexiones», que pretenden entregar a los colegios de médicos de los tres territorios. El escrito, que llega en un momento en el que comienza a hablarse de un posible adelanto electoral, lo firman ocho jefes de servicio «en representación del foro», compuesto por «médicos con diferentes niveles de responsabilidad en la Organización».

En el documento, los miembros del grupo se autodefinen como «los primeros en defender los principios de igualdad, capacidad y mérito en la cobertura de todas las plazas, incluidas las de médicos especialistas hospitalarios», donde se ha detectado el fraude, un término este último que el texto evita en todo momento. «En el marco de estos derechos fundamentales y de la presunción de inocencia, también nos gustaría pedir respeto para las personas implicadas», señala el escrito.

El foro, en línea con el discurso que defendió el dimitido Jon Darpón, es «consciente de la necesidad de un cambio en los sistemas de selección y provisión» de plazas de Osakidetza que, según dicen, «debe ir de la mano de la sociedad» y «la Medicina». En este sentido, invita a las instituciones vascas a que «apuesten» por «métodos que primen la capacidad y la experiencia por encima de todo y que tengan en cuenta la creciente subespecialización de las diferentes especialidades médicas».

Los especialistas también ponen especial énfasis en «la satisfacción» de los ciudadanos con la atención sanitaria y los resultados obtenidos por Osakidetza, que «le avalan como uno de los mejores servicios de salud de Europa». Este argumento ha generado abundante controversia en el debate político. PNV y PSE lo han utilizado como argumento a su favor, mientras que la oposición se ha quejado de forma reiterada de que lo que se juzga no es el servicio de salud, sino un posible fraude.