Los centros con alumnos afectados por los chats con contenido pornográfico superan ya la decena

Hasta el momento, doce centros educativos -diez en Donostia, uno en Irun y otro en Lasarte-Oria - han enviado una carta a los padres para advertirles de que, entre su alumnado, principalmente de Secundaria, había jóvenes a los que habían invitado a participar: Aldapeta Maria Ikastetxea, Zurriola Ikastola, Deutsche Schule San Alberto Magno, St. Patrick's English School, Jesuitak Donostia, Herri Ametsa Ikastola, Luberri, Santo Tomas Lizeoa, Zubiri Manteo y el instituto Usandizaga-Peñaflorida en San Sebastián, el colegio Toki Alai Gazteluzar en Irun, y Oriarte, de Lasarte-Oria. Estos últimos han enviado este mismo jueves una circular a las familias después de detectar que había alumnos incluidos en los chats

Todos los centros piden la colaboración de los padres para comprobar el teléfono móvil de sus hijos y, en caso de que estén dentro de estos chats, acudan a los centros educativos para gestionar las denuncias. Además hay constancia de que hay menores de Errenteria, Oiartzun y Lezo a los que también se ha incluido en los chats. Aunque el alcance geográfico de captación de menores llega también a Bizkaia y Cantabria.

Los dos chats de WhatsApp estarían gestionados por personas adultas ajenas a los propios centros y ya están siendo investigados por la Ertzaintza. La forma de actuar es por invitación; una vez que consiguen que un menor se quede le piden que invite a todos sus conocidos para hacer más grande los grupos, cuyos nombres no dejan lugar a dudas: 'Meter gente hasta llegar a un millón' y 'Meter gente hasta que te hagas famoso'. Este último fue creado el 11 de noviembre y desde hace dos semanas circula por los teléfonos móviles de los menores. El contenido de lo que se ha difundido a través de ellos va desde la pornografía hasta la homofobia, con insultos sexistas, comentarios vejatorios e incluso proclamas políticas. La Fiscalía anticipa que la investigación de los posibles delitos será larga.

La voz de alarma la dio el martes Aldapeta Maria Ikastetxea. El pasado viernes recibió una notificación de una madre cuyo hijo había sido incluido en uno de los grupos y, dado el contenido «altamente desagradable» del mismo, se puso en contacto con el centro educativo. Tras buscar información entre sus propios alumnos, el centro donostiarra comprobó que había 200 alumnos que habían participado en los grupos. Alertados, se pusieron en contacto con la Ertzaintza y enviaron una carta a las familias desde 5º de Primaria (11 años) para comunicarles de la existencia de los foros y de la dureza de su contenido. Ayer fue el primer centro en poner una denuncia en la comisaría de la Ertzaintza del barrio donostiarra del Antiguo, pero no fue el único. Los responsables de Deutsche Schule San Alberto Magno también han interpuesto otra.

Por el momento son las dos únicas denuncias que han llegado a la Policía vasca, que tras ponerse en contacto con los centros educativos ha solicitado la colaboración de los colegios para que sean ellos quienes recojan los datos de las familias afectadas para su posterior entrega en las dependencias policiales y evitar así un goteo de familias a las puertas de las comisarías. Los centros, con mayor o menor número de estudiantes implicados, instan a las familias a denunciar los hechos si tienen conocimiento de que al teléfono móvil de sus hijos ha llegado la invitación de alguno de los dos grupos. Les indican, además, que salgan de los grupos pero que no borren su contenido para que la policía lo pueda analizar.

La de ayer fue una jornada de indagaciones y preocupación dentro de los propios colegios, especialmente en Donostia. El volumen de los foros, con más de mil menores participantes, hacía presagiar que, además de los de Aldapeta Maria Ikastetxea, había muchos más estudiantes de otros centros. Así, el personal de los colegios fue preguntando entre el alumnado de la ESO para saber el alcance de la situación dentro de sus puertas.

En Aldapeta María Ikastetxea recibieron ayer a mediodía la visita de responsables de la Ertzaintza, quienes ofrecieron a la dirección del centro información sobre cómo proceder. «Nos han pedido que vayamos con ellos a poner una denuncia porque Fiscalía veía muy interesante que hubiera una del colegio para poder hacer una investigación», explicaba José Eizmendi, su director. «Así lo hemos hecho. No es un tema propio del colegio, pero las familias sí lo son, y por lo tanto nos incumbe». Ahora su papel será recoger los datos de las familias cuyos hijos «hayan estado o estén en el chat» para trasladarlo a la Policía vasca.

En Zurriola Ikastola vivieron una situación similar a la de Aldapeta. El pasado viernes una madre pidió una reunión urgente con el tutor de su hija para informarle de que la menor había sido incluida en uno de esos foros. Tras comprobar lo ocurrido, el lunes la dirección del centro mandó una circular a todas las familias de Educación Secundaria –alrededor de 600 alumnos– para alertar de la existencia de estos grupos e indicarles cómo proceder. «Es un asunto que nos preocupa desde hace tiempo. De hecho solemos traer a expertos en tecnología para que den charlas tanto a los alumnos como a los padres sobre el uso de los móviles», explica Esther Amondarain, directora del centro.

En el resto de colegios que entre ayer y hoy enviaron una circular a las familias conocieron la existencia de los dos chats «por las noticias que hemos leído». En el caso de Donostia Jesuitak su directora, Itziar Barrenetxea, reconoce que no sabían «nada» porque «ninguna familia se puso en contacto con nosotros por este motivo». Durante el día de ayer los tutores de Secundaria y el responsable del área de entorno del colegio «hablaron con los chavales» para conocer el alcance de la situación, algo que también hicieron en el resto de los centros con casos.