Bildarratz confía en que la pandemia mejore para poder aliviar algunas medidas como pasar de aulas a cursos burbuja

El 80% de los mayores vascos de 12 ya tiene al menos una dosis de la vacuna, por lo que buena parte de los estudiantes ya están protegidos en cierta medida, a lo que se suma una tendencia claramente descendente de la quinta ola. En este contexto, y preguntado en 'Euskadi Irratia' sobre la posibilidad de aliviar las medidas del protocolo anticovid a lo largo del curso en los centros escolares, el consejero ha asegurado que «es algo que se puede valorar» si mejora la situación, pero ha apostado por la «prudencia» y ha defendido la idoneidad de arrancar con los protocolos y los recursos adicionales que se implementaron el curso anterior.

«A finales del anterior curso veíamos que la pandemia mejoraba, pero entonces tanto los directores de los centros, como profesores y el Departamento de Salud acordamos mantener los protocolos, y ahora ya hemos visto lo que luego pasó con la quinta ola. Esperemos que la pandemia mejore y ojalá podamos aliviar algunas medidas de lo lago del curso», ha señalado Bildarratz.

Sobre las medidas que se podrían relajar, ha puesto como ejemplo que se podría reducir la distancia entre las burbujas o ampliarlas, y pasar de burbujas por aula a burbujas por curso en algunas etapas escolares. No obstante, ha recordado que los escolares menores de 12 años están sin vacunar, por lo que «hay que ver» cómo serán los próximos meses y la posible incidencia del virus en este segmento de la población. «En todo caso, estas medidas habría que adoptarlas con prudencia y ser acordar entre todos», ha dicho.

No parece que la eliminación de la mascarilla sea una de las primeras medidas que se relaje. «No sabemos cuánto tiempo habrá que usarla. Todos lo estamos deseando y sería muy importante que pudiéramos prescindir de ella en las aulas, pero seguimos estando en pandemia y hay que actuar con prudencia», ha señalado, para insistir en que «la experiencia nos ha enseñado la importancia de no precipitarse».

Este curso se prevé el cierre de menos aulas de escolares mayores de 12 años gracias al avance de la campaña de vacunación, aunque Bildarratz ha ahondado en la idea de la cautela, «ya que la experiencia nos dice que cuando nos contagiamos luego se puede sufrir un revés».

Sobre la obligatoriedad de la vacunación de los profesionales del ámbito educativo, considera que es el Departamento de Salud quien debe establecer las directrices. En todo caso, ha señalado que más del 90% del profesorado está vacunado.

Bildarratz se ha referido también a otro aspecto que necesitará de atención durante este curso: el aspecto emocional, tanto del alumnado como del profesorado. «En el último año y medio los profesores han trabajado con mucha tensión, debido a la pandemia, y este año también puede aparecer cierto estrés por ello», ha señalado el consejero, quien se ha mostrado convencido de que los recursos adicionales aportados desde el Departamento de Educación también serán de ayuda.

Respecto al pacto educativo que se está impulsando desde el Departamento de Educación, Bildarratz se ha referido a «un debate amplio en torno a la educación para los próximos 30 años» que debe trabajarse con la comunidad educativa, los agentes sociales y los partidos políticos. El consejero se ha referido «a una serie de cuestiones» que hay que poner sobre la mesa y abordar, dentro de este proceso, «como el consenso lingüístico, la cohesión social, el equilibrio entre redes educativas, la descentralización del sistema educativo, o las relaciones con otras instituciones –especialmente los ayuntamientos-», entre otras.