Bilbao adelantará media hora el horario de cierre de las terrazas ante las quejas vecinales

Sánchez considera que apostar por que la hostelería cierre sus terrazas media hora antes es una medida «muy dura». Con total contundencia, la califica como «un ataque en toda regla» contra el sector» y espera que «el Ayuntamiento rectifique». «Hablamos de cientos de horas perdidas al cabo de un año. De un impacto económico terrible», lamenta.

En cuanto a las quejas que denuncian los vecinos (que se genera demasiado ruido y obstaculizan el paso de los peatones), lo califica como un problema «de educación». «Si estoy en un bar y me dedico a cantar, no es un problema de terrazas, sino de orden público», argumenta para defender que estas «conductas incívicas» deberían sancionarse por otras vías y no reduciendo el tiempo en el que pueden estar abiertos los espacios que bares y restaurantes disponen en el exterior. Unos lugares que, por cierto, que cada vez se utilizan más por la temperatura más benigna que ha traído el cambio climático y los nuevos usos impulsados por la pandemia.

El gerente de la patronal de hosteleros llama a hacer una reflexión sobre el modelo de Bilbao que se está construyendo. «Vivimos en una ciudad, con sus cosas buenas y malas. Con sus ventajas e inconvenientes. El ruido de la calle no va a desaparecer, lo que tenemos que hacer es buscar el equilibrio lógico», asegura.

La posición que mantendrán en las conversaciones con el Ayuntamiento sobre la ordenanza será, por lo tanto, de oposición frontal contra esta medida. «Va en contra de incentivar la actividad económica», lamenta al tiempo que asegura que «si un bar en un día concreto no tiene clientes, cierra». Si el local está abierto, por lo tanto, es porque hay personas que quieren seguir consumiendo.

El Ayuntamiento durante las próximas semanas se reunirá con las agrupaciones de vecinos que han realizado aportaciones al texto y las asociaciones de comerciantes más afectadas (Bilbao Centro, Bilbao Dendak, Deusto Bizirik, la Asociación de Comerciantes del Casco Viejo y la Asociación de Hostelería de Bizkaia). Tras este proceso de información previa, y una vez incorporadas las aportaciones «pertinentes», el documento se elevará al pleno municipal para comenzar su tramitación legislativa.

La notificación de que el Ayuntamiento planea reducir en media hora el tiempo en el que puede permanecer abierta las terrazas con autorización en Bilbao ha caído como un jarro de agua fría sobre el sector. El gerente de la Asociación de Hostelería de Bizkaia, Héctor Sánchez, recuerda que estos espacios al aire libre son fundamentales para la supervivencia de bares y restaurantes.

Sánchez considera que apostar por que la hostelería cierre sus terrazas media hora antes es una medida «muy dura». Con total contundencia, la califica como «un ataque en toda regla» contra el sector» y espera que «el Ayuntamiento rectifique». «Hablamos de cientos de horas perdidas al cabo de un año. De un impacto económico terrible», lamenta.

En cuanto a las quejas que denuncian los vecinos (que se genera demasiado ruido y obstaculizan el paso de los peatones), lo califica como un problema «de educación». «Si estoy en un bar y me dedico a cantar, no es un problema de terrazas, sino de orden público», argumenta para defender que estas «conductas incívicas» deberían sancionarse por otras vías y no reduciendo el tiempo en el que pueden estar abiertos los espacios que bares y restaurantes disponen en el exterior. Unos lugares que, por cierto, que cada vez se utilizan más por la temperatura más benigna que ha traído el cambio climático y los nuevos usos impulsados por la pandemia.